Tequila.- “Los obispos fueron engañados por los dos anteriores gobernadores”, afirmó el cura Alejandro Solalinde Guerra, manifestando que el clero no puede estar al servicio del Mandatario en turno.
“Estos gobernadores engañaron a la jerarquía católica local. Quiero entender que fueron hipócritas, presentándose como católicos. Ayudaron (los exgobernadores) a algunos obispos, fueron generosos con algunos. Los obispos no pueden negar que estos ‘benefactores’ son delincuentes. Ya no pueden seguir de la mano del Gobernador en turno, tienen que caminar con su pueblo”, aseguró Solalinde Guerra.
En otros temas, externó que la migración es un fenómeno que lástima a México, siendo resultado de la falta de oportunidades, exclamando su descontento por la existencia de malas administraciones en el Estado.
En este tenor, condenó el alto crecimiento de movilidad que se da en la población indígena, advirtiendo: “Es necesaria una refundación de nuestro País, la cual debe darse a través de los pueblos originarios al representar una reserva cultural y humana rica en valores”.
Sobre seguridad, el religioso opinó: “Aun cuando todo México es inseguro, nuestro Estado ha sido condenado por gobiernos corruptos y criminales, donde la inseguridad es su negocio, pues generan inseguridad y venden seguridad”, afirmó, lamentando que, según su óptica, la inseguridad se mezcle con la impunidad.
“La delincuencia continúa aunque sea con cárteles descabezados como los Zetas o el Cártel del Golfo o grupos recientes como la Nueva Generación. Los colores cambian, pero la impunidad sigue al estar ligada la función pública y la delincuencia. México está lastimado por la falta de paz”, concluyó.
SE REÚNE CON UNIVERSITARIOS
Ante unas 150 personas, el sacerdote Alejandro Solalinde Guerra habló de su visión de lo que llamó un “México enfermo”, de igual forma se refirió a los migrantes y problemas sociales como la inseguridad.
Aun cuando la invitación al evento señalaba la presentación del libro El reino de Dios, replanteamiento radical de la vida, obra del cura activista, sólo le dedicaron los últimos cinco minutos de su visita, en los que se informó sobre la posibilidad de descargarlo de forma gratuita de la web.
Acompañado de Araceli Salcedo, madre de una joven desaparecida hace más de cuatro años y famosa por haber increpado a Javier Duarte cuando era gobernador, se dedicó a un diálogo que incluyó preguntas y respuestas en las que se plantearon diversas problemáticas sociales en la Entidad.
Entre los asistentes, universitarios, indígenas en su mayoría, se distinguían representantes de la UVI, medios de comunicación y representantes de colectivos que se han sumado a la causa del candidato al Premio Nobel de la Paz en este 2017.
Cuestionado sobre la crisis que vive el País, el clérigo dijo sentirse orgulloso de las raíces mexicanas, puntualizando la necesidad de fomentar los valores que representan los pueblos indígenas.
Luego de una hora y 10 minutos de compartir experiencias, la reunión culminó con música de jarana, canciones y baile tipo jarocho amenizado por el grupo “Son de las Verdes Montañas”, quienes en versos y décimas manifestaron descontento social dentro de su toque musical.