CUICHAPA.- Con la última fuga de combustible registrada en Barrio de Guadalupe la mañana de ayer, dañó 50 metros cuadrados de cañales y se formó un pequeño riachuelo de aproximadamente 100 metros de largo, mismos que fueron absorbidos por el estado poroso de la tierra; de estas afectaciones Petróleos Mexicanos (Pemex), no se hará responsable debido a que son ocasionadas por los chupaductos.
Estas fugas clandestinas también afectan mantos friáticos y con ello la fauna; uno de los ríos más afectados es el Cuichapa donde constantemente ha sido contaminado en diversos puntos de su travesía.
Los productores de caña dijeron estar preocupados porque el hidrocarburo contamina sus cultivos debido a los pequeños socavones originados por la plaga de la tuza, mismos que provocan escurrimientos por debajo de la tierra hasta caer en el caudal del río Cuichapa, sin que la paraestatal se preocupe por llevar a cabo estudios que certifiquen las afecciones después de este tipo de incidentes en sus parcelas.
Solicitaron que las dependencias encargadas de los daños ecológicos y ambientales investiguen los daños provocados por estos derrames, porque producir un cultivo contaminado genera graves problemas a la salud.