FRUSTRA SUICIDIO de mamá

 

Orizaba.- Con su bebé de dos meses en brazos, una mujer originaria de La Perla intentó matarse ayer por la tarde en calles del Centro Histórico de Orizaba. Rebeca, su hija de 3 años, la abrazó fuertemente de la pierna e impidió que se le lanzara a los automóviles, para enseguida ser rescatada por elementos de la Policía municipal.

 

“No mami, no te mates”, gritaba la pequeña Rebeca a su mamá Remedios de los Santos Hernández, de 40 años. La niña se aferró a su madre y con llanto le pedía que no se matara.

 

Remedios, quien vive en Los Fresnos del municipio de La Perla, estuvo a punto de provocar una desgracia. Con su hijo en brazos amenazaba con lanzarse hacia los vehículos que transitaban sobre la calle Sur 7, entre Oriente 6 y 4.     “Me voy a matar, me voy a matar”, gritaba Remedios, según explicó una mujer que caminaba por el lugar y se percató de los hechos al escuchar el llanto de la niña de 3 años.

 

Estos hechos, ocurridos alrededor de las 14:10 horas, provocaron consternación entre transeúntes y locatarios de la zona, los cuales intentaban explicarse los motivos que orillaron al ama de casa a atentar contra su vida, y la de sus hijos.

 

Pronto fue pedido el apoyo de elementos de la Policía municipal a bordo de la unidad PA-62, los cuales sin pérdida de tiempo llegaron para impedir que el ama de casa se lanzara sobre los automóviles.

 

Los oficiales resguar-daron a la madre de dos pequeños y solicitaron la asistencia de Protección Civil para valorar el estado de salud de Remedios y pidieron el apoyo del personal de la Procuraduría para la Defensa del Menor, la Familia y el Indígena del DIF municipal.

 

Callada, con los ojos llenos de lágrimas y la mirada perdida, la mujer toma al pequeño de dos meses y lo alimenta, mientras que algunos locatarios del lugar intentan darle ánimos.

 

“Yo también soy madre y entiendo que haya muchas dificultades, pero puedes salir adelante, por tus hijos”, le dice la dueña de un comercio cercano a Remedios.

 

Finalmente la mujer y los pequeños fueron llevados a las instalaciones del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) de Orizaba, en donde se le dará apoyo y se determinará la situación de los menores, mientras que la madre será sometida a un tratamiento para calmar su depresión.