La Fiscalía de Perú ha presentado una acusación penal contra el expresidente Pedro Castillo, solicitando 34 años de prisión por los delitos de rebelión, abuso de autoridad y grave perturbación a la tranquilidad pública. El intento de Castillo de disolver el Congreso y establecer un Gobierno de excepción, ocurrido hace trece meses, resultó en su detención. Además, enfrenta cargos por liderar una presunta organización criminal en el Palacio de Gobierno. La acusación también involucra a su círculo de poder, incluyendo a Betssy Chávez, Willy Huerta, Roberto Sánchez y Aníbal Torres.
La Fiscalía pide 25 años de prisión para Chávez, Huerta y Sánchez, mientras que Torres enfrenta una solicitud de 15 años. El caso implica a altos mandos militares que, según la Fiscalía, siguieron las órdenes de Castillo, y se solicitan 25 años de prisión para tres oficiales de la Policía Nacional del Perú. La defensa de Castillo argumenta que no hubo rebelión al no consumarse el golpe.
El próximo paso será la etapa de control del contenido de la acusación, seguida por el juicio oral. Castillo permanece en prisión mientras la Fiscalía busca su condena.