Córdoba.- El delegado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en la región Veracruz-Sur, Jon Rementería Sempé, aseguró que a pesar de que la época de los ingenios azucareros no es la mejor, la venta de los mismos no pone en riesgo el beneficio de los trabajadores, explicó que aún con factorías que presentan atrasos en el pago de las cuotas obrero-patronales, está garantizado el servicio y atención para todos los obreros,
principalmente por que son ellos quienes conforman el 25 por ciento de la población derechohabiente de la región. Ayer el cuerpo de gobierno de la delegación regional Veracruz–Sur IMSS, se reunió con representantes de la Unión Nacional de Cañeros, Confederación Nacional de Productores Rurales (CNPR), Confederación Nacional Campesina (CNC), así como con los comisionados de las subdelegaciones de Zacatepec, Izucar Matamoros, Coatzacoalcos, Martínez de la Torre, Cuatla, Tehuacán, Cosamaloapan, Córdoba, Tuxtepec, Xalapa, Salina Cruz, Lerdo de Tejada y Orizaba, para promover el convenio de aseguramiento y pago de los productores de caña de azúcar y sus trabajadores eventuales, del ciclo 2015-2016.
En entrevista, el Delegado sostuvo que dentro de los beneficios que conllevan la firma del convenio de colaboración con las organizaciones cañeras, se encuentra la salvaguarda jurídica de los derechos de los trabajadores de la industria, garantizando la atención con calidad y rapidez, principalmente por que la población de los cañeros, demanda una fuerte cantidad de recursos al tener que solventar atenciones e incapacidades.
De los 22 ingenios establecidos en el Estado, 15 corresponden a esta delegación, todos ellos reportan un total de población derechohabiente de 244 mil trabajadores, prácticamente una cuarta parte, del total de la población usuaria en la delegación; a pesar de la gran demanda, sólo se tiene problemas con el ingenio El Carmen, que mantiene un rezago histórico en el cumplimiento de sus aportaciones.
Rementería insistió en que la atención esta garantizada para todos los trabajadores de la industria y en el caso de aquellos ingenios que han sido puestos a la venta, antes de que se comercialicen se deberán saldar los adeudos que se puedan venir “arrastrando”.