Agencias
México.- La Fiscalía General de la República (FGR) intenta resucitar la teoría del “complot” en el caso del asesinato de Luis Donaldo Colosio, buscando implicar a un supuesto “segundo tirador”. A pesar de casi tres décadas desde el crimen, la FGR afirma que Colosio fue víctima de un aparato organizado de poder que involucra al gobierno de Carlos Salinas de Gortari y agentes del Cisen. La orden de aprehensión por homicidio fue solicitada contra José Antonio Sánchez Ortega, agente del Cisen, pero un juez ha frenado temporalmente la orden al considerar que la única prueba es el testimonio de una mujer, Leticia Ortiz, que cambió su declaración después de 25 años.
El juez Jesús Alberto Chávez Hernández negó la orden de captura al cuestionar la fiabilidad del testimonio de Leticia Ortiz, quien ahora señala a Sánchez Ortega como el “segundo tirador”. La FGR sostiene que el agente del Cisen fue liberado horas después de su detención en 1994, y ahora busca implicar a Genaro García Luna y Jorge Tello Peón en el caso. Sin embargo, la evidencia actual parece basarse en testimonios cuestionables, lo que genera incertidumbre sobre la validez de las nuevas acusaciones y su conexión con un contexto electoral.
La investigación de la FGR busca reabrir el caso de Colosio con la intención de señalar a una cadena de mando que presuntamente va desde el gobierno hasta agentes del Cisen. El freno por parte del juez resalta las dificultades para sustentar la teoría del “complot” y la necesidad de pruebas más sólidas para avanzar en la implicación de figuras clave en el magnicidio.
