AGENCIA
Chilpancingo.- Mientras Guerrero enfrenta problemas graves de seguridad, violencia y rezagos sociales, Félix Salgado Macedonio parece más interesado en brillar en la pantalla grande que en atender las necesidades urgentes de su estado. Su incursión en el cine con la película “Tétano, el auto ganador”, que él mismo escribió, produjo y protagonizó, ha generado críticas por su aparente desconexión de las prioridades del pueblo guerrerense.
El estreno de la película en salas de Cinépolis de Guerrero ha sido calificado como un despliegue de poder y abuso de recursos. Mientras el acceso al cine para artistas locales es prácticamente inexistente, Salgado Macedonio logró llenar salas, acompañado por funcionarios públicos y familiares, como su hija Liz Salgado Pineda, presidenta del DIF estatal, quien actuó como anfitriona del evento en horario laboral.
Además, la productora de la cinta, Ámbar Stephanie Santos Ríos, es directora de la Unidad de Igualdad de Género de la Auditoría Superior del Estado (AGE), lo que genera dudas sobre un posible uso indebido de recursos públicos en un estado donde las carencias son evidentes.
La película ha sido tachada por algunos como un “culto a la personalidad” de Salgado Macedonio. El poeta Carlos Ortiz, también cineasta, criticó que este proyecto sea una muestra de soberbia y abuso de poder, en un contexto donde los artistas locales carecen de apoyo para crear y exhibir su trabajo.
Por otro lado, la película es vista como un posible pretexto para posicionar políticamente a Salgado Macedonio rumbo a 2027, cuando podría buscar ser el candidato de Morena a la gubernatura para suceder a su hija, Evelyn Salgado Pineda.
En contraste con el glamour del estreno, Guerrero sigue enfrentando altos índices de inseguridad, violencia y pobreza. Las cifras de homicidios, desapariciones y conflictos sociales demuestran que el estado necesita liderazgos comprometidos con soluciones reales, no con proyectos personales que solo alimentan el ego de sus protagonistas.
El dirigente estatal de Morena, Jacinto González Varona, intentó justificar el proyecto como “arte”, pero para muchos guerrerenses, el verdadero arte sería que sus líderes trabajaran en políticas públicas efectivas para resolver los problemas que aquejan a la entidad.
El estreno de “Tétano” no solo refleja el desinterés de Salgado Macedonio por los problemas de Guerrero, sino también su capacidad para movilizar recursos y atención hacia sus intereses personales. Mientras tanto, la población sigue esperando acciones concretas que realmente beneficien a su estado.
La frivolidad de priorizar un proyecto cinematográfico sobre las necesidades urgentes de Guerrero evidencia la desconexión de Salgado Macedonio con la realidad de un estado que reclama liderazgo, compromiso y soluciones.
