AGENCIA
Tijuana, Baja California.- El pasado 29 de diciembre, una manta con un mensaje amenazante firmada por un grupo identificado como Fuerzas Armadas Apache (FEA) fue colocada en la zona de Otay. Este grupo, enfrentado al Cártel de Sinaloa (CDS), acusó al semanario ZETA de difundir información “sin fundamento” sobre su presunta relación con actos de violencia y cobro de piso.
El mensaje concluye con la frase: “Tijuana para los tijuanenses. Atte: La FEA”, una declaración que refuerza el conflicto territorial entre cárteles y evidencia la constante amenaza que enfrentan los medios de comunicación en la región.
La manta señaló que varios comerciantes han sido asesinados por cobros de piso atribuidos al CDS, y criticó directamente al semanario ZETA, reconocido por su labor periodística de investigación en Baja California.
Este incidente no solo refleja la rivalidad entre grupos criminales, sino que intensifica la preocupación por la seguridad de los periodistas, quienes operan en un entorno cada vez más hostil.
La organización internacional Artículo 19, defensora de la libertad de expresión, condenó las amenazas y exigió a la Fiscalía General de la República (FGR) y a la Fiscalía de Baja California tomar medidas inmediatas para proteger al equipo de ZETA.
Desde 2020, la organización ha documentado al menos 19 agresiones contra este medio, lo que evidencia un patrón de ataques dirigidos a silenciar investigaciones sobre el crimen organizado y la corrupción.
“Es indispensable garantizar la seguridad de los periodistas y llevar a cabo una investigación exhaustiva sobre las amenazas”, señaló Artículo 19 en un comunicado. También advirtió que este tipo de agresiones promueven la autocensura y afectan directamente el derecho de la sociedad a estar informada.
Con décadas de trayectoria, ZETA es un referente del periodismo de investigación en México. Su labor, centrada en exponer los vínculos entre el crimen organizado y actores políticos, lo ha convertido en blanco de múltiples ataques.
Recientemente, el semanario publicó una investigación que reveló el presunto pago de 300 mil dólares por parte de un integrante de un grupo criminal para evitar su captura, un tema que podría estar relacionado con las amenazas actuales.
Tijuana, como punto estratégico para el narcotráfico, es una de las regiones más disputadas por los cárteles. Según un informe de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Michoacán, el Cártel de Sinaloa tiene una presencia predominante en Baja California, donde se enfrenta a células locales y grupos emergentes como la FEA.
Además de los enfrentamientos entre cárteles, la población vive una crisis de inseguridad que afecta a comerciantes y ciudadanos comunes, atrapados en el fuego cruzado por el control territorial.
La aparición de esta manta es un recordatorio de los peligros que enfrentan los periodistas en México, uno de los países más riesgosos para ejercer esta profesión.
Proteger a los medios de comunicación no solo es un acto de justicia, sino una medida fundamental para preservar el acceso a información crítica y garantizar el derecho de la ciudadanía a conocer la verdad.
