La Oficina Federal de Investigación (FBI) detuvo este miércoles a Harun Abdul-Malik Yener, un hombre originario de Florida, quien estaba planificando un ataque terrorista en la Bolsa de Valores de Nueva York. El detenido, de 25 años, enfrentó cargos por intentar utilizar un dispositivo explosivo improvisado con la intención de “reiniciar” el gobierno de los Estados Unidos.
Según el expediente judicial presentado en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en el sur de Florida, Yener explicó a los agentes del FBI que su objetivo era matar a todos los presentes en la Bolsa de Valores para causar un impacto masivo y “despertar a la gente”. Quería ejecutar el ataque la semana anterior al Día de Acción de Gracias, previsto para este jueves, buscando crear caos y derribar el sistema gubernamental actual.
La investigación comenzó en febrero, luego de que el FBI recibiera una pista sobre el comportamiento de Yener. Se descubrió que había almacenado en una unidad de almacenamiento esquemas para fabricar bombas, junto con varios relojes con temporizadores, placas de circuitos electrónicos y otros componentes para construir artefactos explosivos. Además, Yener había compartido en plataformas como YouTube videos sobre cómo fabricar explosivos y fuegos artificiales utilizando artículos comunes del hogar.
El FBI también identificó que el detenido tenía antecedentes penales, incluidos incidentes previos de amenazas. El año pasado, Yener fue despedido de su empleo en un restaurante en Coconut Creek, Florida, después de amenazar a su exsupervisor con perpetrar un tiroteo masivo. Esta amenaza, sumada a su historial de conductas problemáticas, alertó a las autoridades sobre sus posibles intenciones.
Este arresto subraya la constante vigilancia de las autoridades estadounidenses frente a amenazas internas, especialmente aquellas dirigidas contra infraestructuras clave del país como la Bolsa de Valores de Nueva York, un símbolo central de la economía global. La detención de Yener podría haber evitado una tragedia de gran escala y resalta la importancia de la cooperación entre ciudadanos y agencias federales en la prevención de actos terroristas.
La investigación sigue abierta, y el detenido enfrentará un juicio por los cargos en su contra, que incluyen el uso de un dispositivo explosivo para dañar propiedades federales.
