Washington.- El director del FBI, James Comey, confirmó ayer que su agencia investiga sobre la campaña del ahora presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y sus posibles vínculos con el Gobierno ruso para interferir en los resultados de los comicios de noviembre pasado.
Durante su declaración de apertura en la primera audiencia pública realizada en el Congreso sobre el asunto, Comey dijo haber logrado autorización del Departamento de Justicia para confirmar dicha investigación.
Comey afirmó ante los congresistas que su agencia indaga sobre la naturaleza de los vínculos entre el equipo de Trump y el Gobierno ruso, y si hubo “alguna coordinación” entre los esfuerzos del Kremlin y la campaña del magnate.
El director del Buró Federal de Investigaciones (FBI) agregó que la investigación también examinará si se cometió algún tipo de crimen, en relación a las filtraciones de los correos del Comité Nacional Demócrata (DNC) y el jefe de campaña de la entonces candidata presidencial del partido, Hillary Clinton, John Podesta.
Aunque dada la delicadeza de la investigación y el hecho de que aún esté en curso, Comey no pudo responder a muchas de las preguntas de los congresistas por cuestiones de seguridad, también advirtió que la filtración de ciertos documentos pueden llevar incluso a una pena de 10 años de prisión.
Aseguró que no dispone de pruebas para afirmar que Obama interviniera el teléfono de Donald Trump cuando éste era candidato.