Tania López
El Buen Tono
CÓRDOBA.- Lejos de ser un ejercicio de reconciliación, la reunión entre Manuel Alonso y ex aspirantes a la candidatura de Morena en Córdoba dejó al descubierto las fracturas internas del partido.
A decir de uno de los asistentes, no fue más que una puesta en escena para aparentar unidad, una mentira impulsada por el ex secretario de Educación, Zenyazen Escobar García, quien ha usado la mentira y el engaño para llevar dos o tres ex aspirantes a esa reunión e imponer al contador facturero, evasor de impuestos y ahora lavador de dinero sucio como candidato.
Desde el inicio se detectó la simulación, al asistir empleados del ayuntamiento entre los que se encontraban regidoras y sus esposos, simbolizando la hipocresía política que marcó el encuentro.
El acto se realizó en las oficinas de Morena, propiedad de la regidora Isamar Balderas, aliada de Escobar García, pero la unidad que intentaron vender se desmoronó con las ausencias.
La fotografía oficial del evento no ha convencido a nadie, en cambio, ha reforzado la percepción de que a Zenyazen no le importa el costo político. Intenta engañar al electorado con una falsa unidad que terminará por sepultar las aspiraciones de Alonso Cerezo en las urnas, quien les pidió a los presentes no abandonar el proyecto.
