AGENCIA
CDMX.- El Clonazepam, usado por niñas, niños y adolescentes en retos virales que ponen en peligro sus vidas, puede ser adquirido sin mayor problema en el mercado negro que se ha configurado en las redes sociales, en donde cualquier persona puede comprarlo aún cuando al tratarse de un fármaco controlado en farmacias se pide una receta emitida por un médico.
De esta manera, los jóvenes tienen al alcance de un click una gran variedad de medicamentos psicotrópicos con efectos sedantes, hipnóticos, ansiolíticos, anticonvulsivos y amnésicos, que se utilizan para tratar afecciones que incluyen la ansiedad, el insomnio y las convulsiones. En los últimos meses el uso de estos fármacos se ha popularizado entre este sector de la población debido a la difusión de desafíos como el llamado “el que duerme al último, gana”.
Este fármaco también se puede comprar de manera directa en algunos tianguis de la Ciudad de México como el de Las Torres, en Iztapalapa, el cual ha ganado popularidad debido a que se pueden adquirir medicamentos controlados sin ningún tipo de prescripción médica.
“Ese medicamento se puede conseguir en muchísimos lugares, no es tan complicado. Nosotros nos estamos enfocando por parte de la policía cibernética a la prevención, hemos hecho mucha difusión por parte de la Subsecretaría de participación ciudadana más para la prevención que para evitar la compra de este medicamento”, dijo Omar García Harfuch, Secretario de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México.
En tanto, al solicitar el medicamento, de manera directa en sucursales como en portales de algunas cadenas de farmacias como Benavides, Farmacias del Ahorro, San Pablo y Farmacias Guadalajara el personal solicitó inmediatamente una receta.
Ante el creciente número de casos de menores que consumen clonazepam por el reto viral, el pasado mes de enero la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) alertó a la población sobre los riesgos que esto podría provocar.
De acuerdo con la dependencia el consumo inadecuado, sin supervisión médica e irresponsable de fármacos con propiedades ansiolíticas como el clonazepam produce efectos secundarios en las personas los cuales van desde la somnolencia, mareos y náuseas hasta pérdida de equilibrio, problemas de coordinación, dificultad para pensar o recordar, dolor de cabeza, muscular o de articulaciones; visión borrosa, temblores, incontinencia o retención urinaria e incremento de saliva.
Otros riesgos por el consumo de este tipo de fármacos sin supervisión médica son problemas graves de respiración o sedación; incluso, si se combina dicho ansiolítico con determinados medicamentos, puede producir coma.
