AGENCIA
Coatzacoalcos.- Ayer se cumplieron cuatro años de la trágica masacre en el bar Caballo Blanco en Coatzacoalcos, donde 32 personas perdieron la vida en un ataque brutal. Entre las víctimas se encontraba Xóchitl Nayeli, hija de América, quien ahora se enfrenta a la dolorosa tarea de criar a sus tres nietos en ausencia de su madre.
Este año, las madres de las víctimas han decidido guardar silencio.
América explica su decisión: “Todos los del grupo del Caballo Blanco nos vamos a mantener en silencio, no vamos a hacer nada, nada de manifestarnos ni de marchas, porque creo que es una forma de manifestar nuestro dolor en silencio, nuestra inconformidad en silencio, porque al Gobierno entre más le reclames más caso omiso hace”.
A pesar de la investigación por parte de la Fiscalía General de la República, el crimen aún no se ha resuelto. La principal línea de investigación se centra en el cobro de piso. Aunque se ha vinculado a proceso a un individuo apodado “Don Gato”.