Córdoba.- La paz es una situación que se tiene que buscar con el apoyo de la población y una autoridad comprometida para evitar más víctimas de la perversidad de la delincuencia.
Al celebrar el inicio de la Semana Santa con el Domingo de Ramos, el obispo de la Diócesis de Córdoba, Eduardo Patiño Leal, recordó que la iglesia tiene un fuerte compromiso por la paz.
Tras las ejecuciones registradas ayer en la zona de Córdoba, comentó que aunque existen personas a las cuales se les ha “endurecido su corazón”, a modo de atentar en contra de la vida de otra persona, desde la Iglesia Católica se sigue orando para que se abran a la verdad y sobre todo al respeto de la vida, sea cual sea su condición.
Al coincidir estos hechos con el arranque de la Semana Santa, lamentó que este tipo de situaciones sean prácticamente una constante, pues la violencia continúa pese a las manifestaciones ciudadanas y religiosas por la paz que se han realizado en un sinnúmero de veces.
Insistió que la labor desde la Iglesia está enfocada a pedir por la paz; sin embargo, es necesario que a su vez haya autoridades más ocupadas en el tema para que se deje de lado la impunidad y se trabaje en la erradicación de estos delitos.
Cuestionado sobre las estadísticas oficiales que señalan una baja en los hechos de violencia, lamentó que aunque pudiera haber modalidades de delincuencia que van disminuyendo, los que más impactan ocurren cuando se trata de situaciones relacionadas o cercanas a una ciudad.
NO DEBEN
EMBRIAGARSE
Ante la costumbre de algunos ciudadanos de aprovechar la Semana Mayor para la ingesta de bebidas embriagantes, el Obispo recordó que el consumo de alcohol nunca será bueno, pues de alguna u otra forma ocasiona daño al que consume o inclusive a una tercera persona que pudiera resultar afectada.
Por lo tanto, el Obispo dijo que se rechaza toda aquella conducta en la cual haya excesos de este tipo.
Por ello, dijo que no se debe confundir cuando se trata de acercamientos y momentos de sana convivencia con la familia.
