Orizaba.- Falla el Gobierno Federal en la aplicación de estrategias para el combate de la inseguridad, señaló el vocero de la Diócesis de Orizaba, Helkyn Enríquez Báez.
Dijo que tal parece que no les ha quedado claro cuál es el rumbo adecuado, lo anterior al considerar que no es en el incremento de Seguridad, “sino en la promoción de la educación, de los valores y la integración familiar”.
Sin embargo, dijo, “ocurre lo contrario, hoy vemos cómo se está atentando en contra de la familia, incluso desde el Gobierno, se está recortando el presupuesto a la educación, no se dan valores, parece que se está en una cultura de antivalores, entonces estamos en el rumbo incorrecto”.
Mencionó que las instituciones de Seguridad sirven para remediar algo urgente, no para remediar el problema, para ello, dijo que hay que empezar desde la raíz, desde la formación, “y lo están haciendo en la dirección equivocada”.
Mencionó que “desafortunadamente las familias también están fallando, es ahí en donde se puede gestar como en un vivero una nueva familia, una nueva sociedad, una nueva educación en valores y en la experiencia cristiana; o es promotora de buenos ciudadanos o puede ser de malos ciudadanos”.
Pide Iglesia por quienes provocan sufrimiento y muerte
Destacó que no hay Dios que destruya la humanidad, “es la libertad mal usada del hombre que deshumaniza a la sociedad y a las personas”.
Por lo que ante los acontecimientos de inseguridad que se han registrado en Orizaba y la región, comentó que “se está orando por aquellos que, olvidándose que somos hermanos, provocan sufrimiento y muerte”.
Como Iglesia, “nos podemos acercar a Dios para interceder por los que sufren a causa de la violencia, el secuestro, la extorsión, que el Señor los proteja, podemos orar para pedir la conversión de los malvados y de los que ocasionan daño, podemos pedir en la Iglesia al Señor para que nos proteja, nos bendiga y nos guarde”.
Señaló: “la oración es capaz de mover corazones a la conversión y es capaz de mover nuestros corazones a la confianza de que sólo en Dios encontramos refugio, cuando algunas instancias pueden fallar”.
En la sociedad sí hay gente justa, buena y sana
Destacó que en la lectura del domingo se habló sobre el pedir y el orar, pero también que “en la sociedad sí hay gente justa, buena, sana, pero desgraciadamente a veces las noticias de los malvados, de los que no son buenos, hacen ver como si fueran mayoría”.
Dijo que se puede seguir transformando vidas en la medida en que se adentren en la experiencia de la oración, al considerar que “el pedir nos hace ser humildes, porque nos hace reconocer nuestra condición de indigencia, de que necesitamos algo, y así nos damos cuenta de que necesitamos de Dios y de los demás, nos hace crecer en la virtud de la humildad, busquen y encontraran, nos hace ponernos en movimiento, ser dinámicos”, expresó finalmente.