Orizaba.- El primero de noviembre se celebró la solemnidad de Todos los Santos y por ello se expusieron reliquias de primer grado (fracciones de huesos) de algunos santos, entre ellos de San Rafael Guízar y Valencia así como del beato niño Mártir de los Cristeros, José Sánchez del Río, entre otros.
En los templos de la ciudad donde se tienen reliquias especialmente de primer grado, se han expuesto para que los fieles las veneren, explicó el Decano de Orizaba, Román Elías Oficial Gil, quien dijo que en esta fecha se recuerda a quienes tuvieron una vida ejemplar.
En la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús al norte de la ciudad de Orizaba, cientos de niños acudieron a ver películas sobre la vida de los santos, pero también se les habló de la realidad actual en donde la cultura de la muerte está presente como consecuencia de la pérdida de valores.
Este primero de noviembre, al final de cada celebración se hizo la oración por la paz y se pidió la intercesión de los santos para que a nivel nacional se alcance la paz, quede atrás la cultura de la muerte y se tenga la esperanza de superar
esta crisis.
“En este día celebramos a la Iglesia celestial, el dos de noviembre conmemoramos a la Iglesia purgante, aquella conformada por quienes han muerto y aún se purifican con el anhelo de alcanzar la gloria. Aquí en la tierra los bautizados somos la iglesia peregrina que ora por los santos, los fieles difuntos y porque necesitamos vivir en paz”, dijo más tarde en su mensaje el párroco de la Catedral de San Miguel Arcángel, Antolín Bernardi, quien también celebró misa de Todos Santos.
Este 2 de noviembre, al conmemorar el Día de los Fieles Difuntos, la Iglesia católica en Orizaba propone orar por las personas que han muerto víctimas de la violencia e inseguridad y se espera que miles acudan a misa y a llevar flores a los cementerios.
Matilde De los Santos Parada
El Buen Tono