Alejandro Aguilar
El Buen Tono
Córdoba.- Cuatro años después de la tragedia de plaguicidas de Anaversa se incrementaron los padecimientos crónico-degenerativos. Según el investigador Doctor Ramón Rocha Manilla en ese periodo, más del 70% de la población en Córdoba tuvo al menos un grado de intoxicación el día del incendio.
El 3 de mayo de 1991, alrededor del mediodía, la planta se incendió y explotó, lo que provocó una nube tóxica que se extendió alrededor de un tercio de la ciudad. Los efectos directos no fue tan sólo para quienes vivieron en ese punto, ni las consecuencias fueron inmediatas.
De acuerdo al estudio ”Epidemiología comparativa crónico degenerativa” que facilitó el Doctor Ramón Rocha Manilla a este medio, se revela que luego del accidente y posterior a los cuatro años hubo un incremento en ciertas enfermedades en la ciudad:
Para 1995 los tumores malignos se incrementaron en un 22%; las nefritis en 1991 tuvo un alza de un 28.5%, pero en 1992 se dispararon en un 80 %; entre 1991 y 1992 las cirrosis se incrementaron en un 38 % y la Diabetes Mellitus 2 en 1991 se incrementó en un 44.8% y para 1992 fue un alza del 56.5%.
