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Miami, EE.UU.- Un grupo de 32 exjefes de Estado ha lanzado duras críticas contra los gobiernos de Brasil, Colombia y México, acusándolos de alinearse con el “propósito del dictador” Nicolás Maduro de mantenerse en el poder en Venezuela. Según estos exmandatarios, la postura de estos países es “escandalosa” y representa un “verdadero atraco al derecho democrático interamericano”.
Los exlíderes, que forman parte de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (IDEA), han expresado su preocupación por las intenciones de Maduro de promover nuevas elecciones en Venezuela. Según ellos, esta acción “anularía la voluntad popular ya expresada de manera inequívoca” en las urnas el pasado 28 de julio, cuando, según informes técnicos de la Organización de los Estados Americanos (OEA) y del Centro Carter, la dictadura de Maduro sufrió una “derrota incuestionable”.
El comunicado de IDEA también hace referencia a un informe de un panel de expertos de la ONU, el cual señala que las actas de la oposición “exhiben todos los dispositivos de seguridad de los protocolos originales de los resultados” electorales, en contraste con el anuncio del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela, que proclamó a Maduro como ganador sin divulgar los resultados tabulados a los candidatos, algo que el grupo considera “sin precedentes en elecciones democráticas contemporáneas”.
Los exjefes de Estado también han denunciado la falta de independencia e imparcialidad de la Administración de Justicia en Venezuela, que, según la ONU y la OEA, es “cómplice necesaria en los crímenes de lesa humanidad” que actualmente son investigados por la Corte Penal Internacional.
IDEA ha denunciado además que, tras las pasadas elecciones presidenciales en Venezuela, se han producido miles de detenciones y desapariciones, así como un número significativo de asesinatos y torturas. Según el grupo, la “dictadura venezolana” busca diluir la responsabilidad jurídica de aquellos que falsificaron los resultados electorales mediante la intervención de las instituciones clave del país, incluyendo el Poder Electoral, el Tribunal Supremo de Justicia, la cúpula de la Fuerza Armada y el Ministerio Público.
El comunicado concluye advirtiendo que, al tolerar los planes del gobierno venezolano, los gobiernos de Brasil, Colombia y México están comprometiendo el respeto al comportamiento democrático universal, lo que tiene implicaciones no solo para Venezuela, sino también para sus propias naciones. La proclamación del triunfo de Maduro para un tercer mandato consecutivo ha sido rechazada por la oposición mayoritaria en Venezuela y calificada de “fraude”, mientras que varios gobiernos extranjeros y grupos de veeduría internacional también han cuestionado la legitimidad de los resultados.
