Orizaba.- En 2015, se reunieron 288 firmas en contra del director del Instituto Tecnológico de Orizaba (ITO), porque su personal no lo quiere por prepotente y vengativo, señaló el maestro y exdirigente sindical, Enrique Martínez Castillo.
Aseguró que para estas fechas son más los inconformes, a pesar de que llevan un año pidiendo su salida.
Dijo que ante la Dirección General de Institutos Tecnológicos, la Secretaría de Educación Pública y la Subsecretaría de Educación Superior, se denunciaron diversas irregularidades cometidas por el director del Instituto Tecnológico de Orizaba, Rogelio García Camacho, por lo que solicitaron su destitución y que se le iniciara una auditoría, “en virtud de tener testigos de salida ilícita de ciertas cantidades de dinero”.
Entre las quejas, dio a conocer, está que alumnos de 30 o 40 grupos resultaron afectados porque la Dirección retrasaba la convocatoria de examen interno, para contratar a un catedrático frente a grupo, cuando al fin quedaba un maestro, el semestre iba a la mitad del curso, “las materias que no se cubren con la convocatoria del personal de base se hace con una convocatoria externa, ese proceso se llevaba casi medio semestre, entonces medio semestre estaban sin clases los alumnos”.
Dijo que lo denunciaron, “con la intención de que la Dirección se diera cuenta de cuántos miles de estudiantes salieron perjudicados, porque ese es un delito muy grave y no lo atendió el director general, por eso la SEP a nivel superior sí nos contesta”.
Explicó que debido a que no atendieron el reclamo, interpusieron esa queja ante la Secretaría de Educación Pública y la Subsecretaría de Educación Superior, dicha contestación fue enviada del Departamento Jurídico de la SEP y le llegó al plantel del ITO, sin embargo, el director tomó la correspondencia y no la entregó.
“Nosotros investigamos y nos dimos cuenta que efectivamente la Subsecretaría nos mandó el sobre a Orizaba, a mi nombre, investigamos y sí lo anotan en la bitácora de la guardia, porque ahí viene el nombre de la guardia que lo recibe, los de las puertas”, refirió.
Con ello, insistió que el director del ITO cometió un delito federal al no entregarle la correspondencia, “lo reportamos a Dirección General y nos dicen que es sujeto a una demanda penal”.
Pese a ello, dijo que tomó la decisión de no proceder, pues, tal y como lo conocen, acusaría al chofer que trae consigo y no se haría responsable del delito que cometió.
Señaló que suponen que hasta el momento no lo han despedido o removido de su cargo, porque a nivel nacional son muchos los problemas que se tienen con directores indeseables, “como el de Orizaba y de otros tecnológico, ahí siguen, por la vía legal ya lo hicimos, inclusive metimos 288 firmas del personal que pide su salida y a estas alturas yo siento que es más personal el que está inconforme”.
