Adriana Estrada
el buen tono
Orizaba.- La militancia morenista se encuentra molesta y se han dado divisiones desde hace unos meses, principalmente con la dirigencia nacional y estatal, al no haber cumplido con los estatutos, lo que muestra la debilidad que existe desde las bases, expresó Jesús Víctor García Reyes,
politólogo y sociólogo.
“Se observa enorme inconformidad en el partido, es a todas luces indicación de que las cosas al interior no marchan bien”.
Recordó que desde hace tres años, el Comité Nacional debió convocar a participar en el Tercer Congreso Nacional Ordinario del partido, pero no lo hizo y fue por eso que se desencadenó una serie de atropellos a la militancia por parte de las direcciones estatales y violaciones múltiples al estatuto del partido.
Dijo que el partido administra, cada año, un promedio de 4 mil millones de pesos para su organización y actividades, reflejando que tiene recursos, aun con la pandemia, pero que se usó como excusa para no convocar al Congreso, un acto irresponsable de la dirección nacional, lo que generó en las entidades federativas el surgimiento de grupos vinculados a caciques locales, rurales y urbanos.
“El partido se administró con sus comités estatales, con delegados en función de presidentes, nombrados verticalmente por el presidente del partido Mario Delgado. Desde luego, todos afines a los designios autoritarios, del que se convirtió en el jefe del partido nacional, creando una estructura organizativa paralela a la oficial. Es decir, limitó las funciones de la Secretaría de Organización Nacional, sin facultad alguna de hacerlo, construyó otra organización interna, cuyo control lo tiene como máximo dirigente”. Por todo esto, ocasionó que los convencionistas del partido exijan la rendición de cuentas y sujetarse a las normas del partido, pidiendo además la renuncia de Mario Delgado y de la secretaria general Citlalli Hernández; comprobando todos los movimientos fuera de lo permitido por el partido, en las
pasadas elecciones.