Zongolica.- Justicia y la intervención de las comisiones Nacional Para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (CDI) y la de Nacional de Derechos Humanos (CNDH), pidieron cientos de vecinos de Auscuahutlamanca, quienes dieron el último adiós a Isabel Xochiquiquisqui Calihua, la joven de 19 años que falleció luego de un accidente que sufrió en Ensenada, Baja California.
Familiares y amigos mostraron indignación por el hecho que le costó la vida a quien sólo quería mejorar, por ello con cantos y rezos la despidieron, “se trataba de una chica humilde, trabajadora y honrada”.
En medio del dolor y llanto que les provocó la pérdida de Isabel, más de 300 pobladores de su localidad y otras comunidades vecinas acudieron a la Eucaristía celebrada en la capilla del pueblo, que por su tamaño sólo pudo albergar a la mitad de los acompañantes, que pidieron por su alma.
Al terminar el servicio religioso, el ataúd color gris metálico fue llevado en silencio hacia el camposanto, ahí le rindieron los últimos rituales propios de la fe cristiana, cantaron las tradicionales Mañanitas por su cumpleaños que estaba cerca de celebrar.
Familia
La muerte de la chica nativa de la localidad dejó inconsolables a sus padres, dos hermanas y un hermano, quienes no daban crédito a lo acontecido y pedían a Dios el descanso de su familiar; mientras recordaban que desde sus 14 años se dedicó a trabajar en labores del hogar o como jornalera en diversos campos del País, para enviar el sustento diario a sus padres y hermanos.
Entre las palabras dirigidas por pobladores y vecinos, se pidió públicamente la intervención de la CDI y la CNDH para la regulación de las empresas que trasladan a personas de todas las edades, a fin de trabajar en los cultivos de jitomate y otros productos de temporada.
Manifestaron que no se les brinden las mínimas condiciones de seguridad social y bienestar en el lugar donde residen, mientras laboran por ciclos de diversas cosechas.