Cosolapa.- Rebasa la delincuencia a la Policía estatal, ahora hasta en sus propias narices les queman una patrulla de Tránsito y ni cuenta se dan, un profesor que vive cerca de donde fueron los hechos despertó asustado con su familia al escuchar las explosiones y a cubetazo limpio logró apagar el fuego de la unidad de vialidad que quedó convertida en cenizas.
Oficiales de la Policía estatal y vial intentaron esconder la información negando que los violentos hechos se hubieran suscitado, pero esto fue desmentido por el propio profesor que sofocó las llamas de la unidad, misma que después de ser controlado el siniestro los policías remolcaron los restos al reclusorio, donde fue parada y escondida entre otras camionetas.
Esto para evitar que se diera a conocer la gravedad de la ingobernabilidad que existe en el pueblo de Cosolapa, donde ni siquiera los más de 20 policías estatales que resguardan el pueblo han podido acabar con la inestabilidad social que prevalece.
Esto debido a la tensión que se vive día a día, donde en la madrugada se pueden escuchar las descargas de armas de fuego que irrumpen la oscuridad, entre otras situaciones delictivas que se ocultan por parte de autoridades.
Ahora hasta las unidades oficiales están siendo quemadas, dejando ver los policías que han sido superados por la delincuencia.
Julio Valdivia
el buen tono
