El meteorito Tissint, que cayó a la Tierra en 2011, podría ser la clave para comprobar que Marte es volcánica y geológicamente activo, ya que proporcionaría la primera prueba química sólida sobre la convección del magma de ese planeta.
De acuerdo con el estudio publicado por Meteoritics & Planetary Science, los cristales de olivino hallados en el meteorito solamente podrían haberse formado en temperaturas cambiantes, a medida que se arremolinaba en las corrientes de convección de magma. Esto muestra que Marte era volcánicamente activo cuando se formaron los cristales, entre 574 y 582 millones de años atrás y también podría serlo hoy.
El geólogo planetario Nicola Bari, de la Universidad de Glasgow, uno de los autores de la investigación, detalló que “no había evidencia previa de convección en Marte”, a la vez que aseguró que este es el primer estudio que prueba la actividad en el interior del planeta desde un “punto de vista puramente químico, en muestras reales”.