En las relaciones modernas, el concepto de “cushioning” está ganando notoriedad, pero ¿qué significa realmente? Este fenómeno, también conocido como “relaciones de reserva”, involucra mantener conexiones con otras personas, ya sea de manera consciente o inconsciente, con la esperanza de algún día dar un paso hacia un encuentro romántico o sexual, según el Dr. Martin Graff, líder en Psicología de la Universidad de South Wales, Reino Unido.
¿Qué es el “cushioning”?
El “cushioning” actúa como un “cojín de seguridad emocional”. Se trata de mantener interacciones superficiales o amistades con otras personas fuera de una relación comprometida para, en caso de que las cosas no funcionen con tu pareja actual, tener opciones disponibles. El Dr. Unai Aso, psicólogo sanitario en la Universidad del País Vasco, explica que este comportamiento se da cuando una persona tiene “opciones en reserva”, lo que ayuda a amortiguar el dolor y la vulnerabilidad que podrían surgir de una ruptura o rechazo.
Este fenómeno puede manifestarse a través de conversaciones con otros intereses románticos, mantener activas aplicaciones de citas durante una relación, o incluso al establecer encuentros casuales sin comprometerse totalmente con otra persona. Sin embargo, el objetivo no es necesariamente involucrarse emocionalmente, sino construir una red de seguridad emocional.
¿Por qué recurren a esta práctica?
El “cushioning” es una forma de lidiar con la soledad, las carencias emocionales o el miedo al compromiso. Según un artículo de la UNAM, quienes practican esta técnica buscan llenar vacíos como la falta de cariño, pasión o compañía. La inseguridad emocional y la necesidad de validación externa también impulsan esta práctica.
El Dr. Aso agrega que este comportamiento puede ser tanto consciente como inconsciente, reflejando las dificultades y complejidades de las relaciones en la era digital, donde las opciones y las conexiones fugaces abundan.
¿Cómo afecta el “cushioning” a una relación?
Cuando uno o ambos miembros de la pareja practican el “cushioning”, pueden surgir varios problemas. El primero de ellos es la desconfianza: la presencia de opciones “en reserva” puede hacer que la otra persona dude de la sinceridad y fidelidad de su pareja. Además, la intimidad emocional profunda se ve obstaculizada, ya que mantener reservas emocionales dificulta la conexión auténtica.
Con el tiempo, el “cushioning” puede deteriorar la calidad de la relación, llevando a inseguridades, ansiedad y una sensación constante de competencia. La falta de compromiso también genera una atmósfera de incertidumbre, ya que cada miembro de la pareja teme ser reemplazado en cualquier momento.
7 señales de que estás siendo víctima del “cushioning”
El Dr. Unai Aso comparte algunas señales clave para identificar si tu pareja está practicando el “cushioning”:
- Interacciones ambiguas con otros posibles intereses románticos.
- Uso activo de aplicaciones de citas o exploración de otras opciones románticas.
- Evita compartir emociones profundas contigo.
- Se resiste a etiquetar la relación o evitar compromisos claros.
- Comportamiento coqueto con otros, incluso en tu presencia.
- Mantiene conversaciones íntimas con otras personas.
- Te compara constantemente con otras personas en términos de atractivo o compatibilidad.
¿Cómo prevenir y enfrentar el “cushioning”?
Para superar esta práctica y proteger tu relación, es clave adoptar estrategias que fortalezcan la confianza y la comunicación. Aquí algunos consejos:
- Fomenta la comunicación abierta y honesta: Hablen sobre sus emociones, preocupaciones y necesidades regularmente.
- Establece límites claros: Asegúrate de definir lo que es aceptable en la relación y mantén una comunicación constante.
- Comprométete plenamente con tu pareja: Haz de la relación una prioridad, dedicando tiempo y esfuerzo en ella.
- Fortalece la confianza: Demuestra tu compromiso con acciones concretas y palabras que refuercen tu apoyo emocional.
Si el “cushioning” está afectando tu relación de manera significativa, no dudes en buscar ayuda profesional. Un psicólogo puede proporcionarte herramientas para enfrentar este comportamiento y restaurar la salud emocional de la relación.
El “cushioning” refleja una de las realidades de las relaciones en la era digital, pero con comunicación, confianza y límites claros, es posible evitar que esta técnica afecte tu vida amorosa.