Fortín.- A unos días de que se presente el Primer Informe de Gobierno municipal de Armel Cid, el regidor cuarto de extracción panista, Rafael Uribe Cuauhtzihua, reconoció que dicho gobierno quedó en deuda con la ciudadanía, sobre todo en materia de obra pública.
Sin embargo, el edil no atribuyó toda la responsabilidad al alcalde en turno, Armel Cid de León, pues justificó que efectivamente ante la mala administración que se aplicó en las finanzas del municipio, especialmente por los dos alcaldes anteriores, César Torrecilla Ramos y su suplente, Carlos Junco, Fortín fue vetado de varios programas, lo que impidió trabajar al cien por ciento.
“Este año sí fue raquítico en cuanto a obras y acciones, pero es la verdad, estuvimos muy limitados en cuanto a recursos y en comparación con otros municipios, Fortín se vio muy lastimado.”
Pese a reconocer que los estados financieros del municipio no fueron los mejores, a prácticamente mes y medio de terminar el primer ejercicio fiscal, el edil también reconoció que “no hay dinero” es un discurso ya cansado que debe ser cambiado de inmediato para 2015.
“Ya ese discurso tiene que cambiar, es un hecho, todos sabemos que hoy a Fortín le repercuten los malos manejos de las malas administraciones anteriores, más allá de Junco.”
Este año, dijo, los malos antecedentes crediticios del municipio con la mayor parte de las dependencias “ató de manos” a las autoridades, por lo que este mismo crecimiento se hubiera dado con quien hubiera llegado a la silla presidencial, de cualquier partido, apuntó el regidor panista.
Sin embargo, sí consideró que terminando este año se desbloquearán los recursos y con la captación de impuestos, el discurso definitivamente debe cambiar.
Celia DÌaz
El Buen Tono