Córdoba.- A decir del director del rastro TIF de Cuitláhuac, Jaime Crivelli Espinoza, el Ayuntamiento “forzó” el cierre parcial del Rastro Municipal, pues dejó de cumplir con las normas sanitarias. “Esa era su intención, y lo lograron”.
“El Ayuntamiento se pasó por el arca del triunfo el acta de Cabildo y del Congreso del Estado para cerrar el Rastro Municipal, todo fue parte de algo planeado y promovido por las mínimas medidas salubres con las que operaba el lugar de matanza, poniendo en riesgo la salud de los cordobeses”, explicó el entrevistado.
Crivelli Espinoza lamentó, que las autoridades municipales hayan incumplido con los compromisos pactados, resultando perjudicados los consumidores, quienes en la actualidad compran carne de cerdo insalubre.
“Los cerdos se matan en un mugrerío, por lo que representa un riesgo sanitario para la población, todo esto orillado por las autoridades municipales”, aseveró el entrevistado.
El director del Rastro TIF, explicó que el compromiso del Ayuntamiento era cerrarlo, basado en un acta de Cabildo, así como el de Cuitláhuac, cuyo documento fue avalado por la Legislatura, pero lamentablemente se lo pasaron por el arca de triunfo ya que aún continúa operando a un 50 por ciento de su capacidad”, concluyó.
Ricardo Jácome Zavaleta
El Buen Tono
