AGENCIA
CDMX.- Andrés Manuel López Obrador, presidente mexicano arrancó su conferencia de prensa aceptando que hubo un “hackeo”, un robo de información, ataque cibernético a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) como se dio a conocer la tarde de ayer.
El Mandatario señaló que los autores de ese ataque vienen del extranjero, ya que ese tipo de delitos se han hecho en otros países Guatemala, Colombia, Chile y El Salvador.
Consideró que es algo que se maneja desde el extranjero, “no es de México, quien lleva a cabo la extracción de la información debe ser una agencia o un grupo del extranjero, dudo que sea nacional”.
Destacó que los ciberdelincuentes aprovecharon que la Sedena estaba realizando un cambio en el sistema de información.
Llama la atención que “hackers” súper inteligentes, hicieron un súper trabajo para darle documentos privados del gobierno a “Latinus”.
Aunque no entienden lo trascendental de esas filtraciones, obviamente hay mucho más que solo la salud de AMLO, a esperar a ver si revelan todo.
Filtraciones de la Sedena, Ayotzinapa, etc. El “fuego amigo” esta muy rudo en Palacio Nacional. Lo bueno que López Obrador, protege y quiere a los “hackers”, como a Julian Hassange.
Y según AMLO presume de transparencia en su gobierno, todo lo que han de estar ocultando como los contratos de las vacunas Covid por ejemplo.
Destaparon la cloaca, tanto que hablaba de Assange, que es el nuevo Quijote y ahora el karma, estos no son héroes para él, solo Assange porque le sirve para su teatro y propósitos político-electorales.
Estas son las consecuencias de distraer a la Sedena de función primordial: defensiva. Duele reconocer decenas de labores civiles ajenas a la disciplina militar y explicar la incapacidad para cuidar la seguridad de los datos. Y el Comandante Supremo legitimando a Assange.
