AGENCIA
Acapulco.- El pasado 14 de agosto, el puerto de Acapulco, Guerrero, fue escenario de una serie de homicidios que dejaron cuatro víctimas. Entre ellas, se identificó a una adolescente de origen estadounidense, cuyos restos evidenciaban signos de extrema violencia.
Fátima “N”, de 17 años, había sido reportada como desaparecida el 13 de agosto, apenas un día antes de que su cuerpo fuera hallado. Según la ficha de búsqueda emitida por las autoridades, la joven, aunque de nacionalidad norteamericana, había residido en Acapulco durante más de una década. La última vez que se le vio con vida fue en la colonia Ciudad Renacimiento, una zona suburbana del puerto, donde vestía una playera negra, un short gris y sandalias.
El miércoles, aproximadamente a las 15:30 horas, los restos de Fátima fueron encontrados en el interior de una camioneta en el poblado de La Venta. La joven, quien habría sido torturada y decapitada, fue identificada por su familia la tarde del jueves.
Las autoridades locales han iniciado una carpeta de investigación por homicidio calificado en relación con este atroz crimen. Mientras tanto, la presencia de la Guardia Nacional se ha incrementado en el puerto de Acapulco, en respuesta al aumento de la violencia que se atribuye a la presunta pugna entre grupos delictivos. La situación ha generado una creciente preocupación entre los residentes, quienes enfrentan una escalada de inseguridad en la región.
