De la Redacción
El Buen Tono
CÓRDOBA.- Con las mañas que siempre lo caracterizaron y viendo la debacle del INE, Indalecio Santiago Gerónimo se adelantó y pidió su jubilación para que no le recorten las prestaciones.
Ayer se conoció el retiro del vocal ejecutivo del INE en Córdoba, legalizador de fraudes electorales, quien por más de tres décadas vivió del presupuesto, haciendo gala de corruptelas en elecciones federales.
Durante su periodo fueron muchos y frecuentes los reclamos de partidos políticos, candidatos y sociedad en general, quienes en diversas ocasiones señalaron al funcionario de “delincuente electoral”.
Con la salida de este “mapache” termina una época de corrupción y malos manejos de las elecciones federales, que alcanzó a contaminar los comicios distritales y hasta municipales, en los que tuvo intromisión el IFE, después INE.
Indalecio se despide del INE, tras 32 años en el instituto, desde donde fue cómplice de una serie de irregularidades en al menos 10 procesos electorales donde le tocó organizar y recibir ‘moche’ para legalizar fraudes y vender los triunfos al mejor postor.
Indalecio se va hasta ahora, a pesar de que pudo ser objeto de jubilación hace varios años, porque ha preferido trabajar, por los “moches” que le dan en todas las elecciones.
Es como el caso de los magistrados, quienes se aferran al cargo, no por el sueldo sino por lo que les reparten a cambio de “favores”, por eso se quedan ahí y no se quieren ir.
Marco Antonio Martínez Mendoza, vocal secretario, será quien asuma el cargo de vocal ejecutivo en forma interna, en tanto se determina quién será el próximo titular… ¿Será que ahora sí el INE en Córdoba se va a apegar a sus principios rectores: legalidad, certeza, imparcialidad y objetividad?
