De la Redacción
El Buen Tono
NOGALES.- Bajo el pretexto de “revisiones por ebriedad”, elementos de la Policía y agentes de Tránsito detienen a conductores que intentan salir de la zona de la laguna de Nogales, después de estar en el Laguna Fest, una actividad que utilizan para extorsionar.
De acuerdo a ciudadanos que visitan el festival, los operativos de seguridad son un negocio lucrativo, pues los uniformados se la pasan cobrando “moches” a cambio de permitir el paso libre, mientras las autoridades municipales, encabezadas por el alcalde Ernesto Torres, igual son corruptas.
Señalaron que el hostigamiento de parte de los elementos, es en los puntos de control cercanos a la laguna, donde los agentes detienen vehículos al azar, especialmente a quienes salen del evento, alegando revisiones de alcoholimetría. Sin embargo, en lugar de aplicar pruebas formales, los conductores son sometidos a interrogatorios intimidantes que derivan en solicitudes abiertas de dinero.
“No importa si tomaste o no: si no cooperas, te inventan una falta o te llevan al corralón”, señaló un visitante que prefirió guardar el anonimato por temor a represalias.
A pesar de las múltiples denuncias en redes sociales, la administración de Ernesto Torres no ha hecho caso sobre los señalamientos, por lo que los afectados consideran que estos actos de corrupción son en complicidad del gobierno municipal.
Los ciudadanos señalaron que este tipo de abusos son un secreto a voces que, en cada evento que hay en la laguna, los policías ‘hacen su agosto’ sin que nadie les diga nada.
El Laguna Fest, el evento que buscó promover el turismo y la economía local, se vio empañado por prácticas que refuerzan la desconfianza en las instituciones, donde los visitantes foráneos expresaron su indignación, considerando que “vienes a relajarte y terminas sintiéndote como si te asaltaran, pero con placas y uniformes”.
