Agencias
Chiapas.- En lo que va del año, Chiapas ha registrado la muerte de 15 personas durante el proceso electoral, entre ellos cinco candidatos. Estos asesinatos se han producido en áreas donde operan cárteles del narcotráfico, como el de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), así como la banda criminal centroamericana La Mara Salvatrucha. La violencia en la región se debe a la disputa por el control de las rutas de tráfico de drogas, armas y migrantes.
En enero, el candidato a la alcaldía de Suchiate, David Rey González Moreno, fue asesinado, seguido en marzo por el precandidato del PRI al Ayuntamiento de San Juan Cancuc, Diego Pérez Méndez. En abril, el ex alcalde y candidato del PRI a la presidencia municipal de Amatenango del Valle, Julián Bautista Gómez, también fue ultimado. Más recientemente, en mayo, el quinto regidor al municipio de Ostuacán, Mauro Hernández Pérez, murió durante un atentado contra el candidato a la alcaldía de Benemérito de las Américas, Juan Gómez Morales. Además, la candidata a la alcaldía de La Concordia, Lucero López Maza, del Partido Popular Chiapaneco, fue asesinada.
La violencia electoral en Chiapas refleja la intensa lucha entre los cárteles de Sinaloa y CJNG, así como la presencia de grupos como La Mara Salvatrucha y Los Huistas de Guatemala. Esta situación ha llevado a la muerte no solo de candidatos, sino también de personas que los acompañaban, subrayando la gravedad de la inseguridad en la región durante este proceso electoral.
