CDMX.- Cooperar con la Fiscalía General de la República (FGR), no sólo libraría a Emilio Lozoya Austin de pisar la cárcel, si no que podría ayudar a su familia a sortear las acusaciones que se mantienen en su
contra.
El ex director de Petróleos Mexicanos (PEMEX), primero tiene que alcanzar el criterio de oportunidad que dependerá de la valoración que haga la FGR, a cargo de Alejandro Gertz Manero, sobre la información que proporcione.
Lozoya Austin tendría más de 16 horas en video y grabaciones para ofrecer al Ministerio Público.También se convertiría en “testigo colaborador”, conforme a la Ley federal de protección para las personas que intervienen en el procedimiento penal.
Esto beneficiaría a su esposa, Marielle Helene Eckes y su hermana, Gilda Susana, así como su madre, Gilda Austin, quienes podrían acceder a convertirse en “personas protegidas” por este caso y en su momento podría ayudarles a acortar su proceso o reducir penas, a fin de que tampoco lleguen a prisión.
PRÓFUGAS Y EN PRISIÓN DOMICILIARIA
Respecto a la esposa y hermana de Lozoya pesan órdenes de aprehensión y actualmente son prófugas de la justicia.
A Marielle Helene Eckes, autoridades la tienen ubicada en Alemania, donde es originaria, mientras que a la hermana está pendiente a cumplir la orden de aprehensión desde el 25 de mayo del año pasado.
El caso de la madre de Lozoya, Gilda Austin, es más sencillo, pues aunque ya fue vinculada a proceso, por su edad, 71 años, le fue impuesto arraigo domiciliario por los delitos de asociación delictuosa y “lavado” de dinero.
PARA SABER
¡Entonces en México no hay Estado de Derecho, liberan a cuanto ladrón le roba!