AGENCIA
Internacional.- El reconocido líder de la pandilla MS-13, Elmer Canales Rivera, comenzó su proceso judicial en Long Island, Nueva York, enfrentando acusaciones relacionadas con conspiración para proveer y ocultar apoyo a terroristas, actos de terrorismo transnacional, financiamiento de terrorismo y narcoterrorismo. Su enjuiciamiento en Estados Unidos podría implicar un acuerdo de reducción de pena a cambio de información clave en la investigación sobre negociaciones entre pandillas y el gobierno de El Salvador.
Información de un pandillero conocido como SinNombre sugiere una coordinación transfronteriza de la MS-13. Este individuo proporcionó detalles sobre la logística de movimientos entre Guatemala, México y El Salvador, señalando que el gobierno salvadoreño habría trasladado a un pandillero hasta la frontera de Guatemala, donde fue recogido por miembros de la MS-13 guatemalteca. Estas revelaciones plantean interrogantes sobre el papel de la pandilla en la región y su posible colaboración con funcionarios gubernamentales.
Aunque Canales Rivera enfrenta cargos en Estados Unidos, la información que podría ofrecer sobre las actividades de la MS-13 y sus conexiones en Centroamérica podría tener implicaciones más amplias, incluida la posible colaboración con funcionarios gubernamentales en El Salvador. Este desarrollo legal ocurre en el contexto de un Régimen de Excepción en El Salvador, que ha generado informes de violaciones a los derechos humanos.
En noviembre de 2023, autoridades mexicanas capturaron a Canales Rivera, alias “El Crook”, acusado de terrorismo en Estados Unidos, siendo posteriormente extraditado. A pesar de estar cumpliendo condena en El Salvador, una serie de publicaciones en redes sociales de Yesi Carolina Chávez Ramírez, su pareja sentimental, generaron sospechas sobre su liberación ilegal por el gobierno salvadoreño.
Imágenes y videos en redes sociales permiten rastrear el recorrido de Canales Rivera desde su liberación en El Salvador hasta su presencia actual en México. Yesi Chávez proporcionó detalles sobre su ubicación en México, afirmando estar embarazada de “El Crook”. La información revelada plantea preguntas sobre la coordinación transfronteriza de la MS-13 y su relación con el gobierno salvadoreño.