Los estadunidenses acudirán a las urnas el primer martes de noviembre para elegir a un nuevo Presidente de los Estados Unidos o relegir al mismo. Pero ¿Cómo funciona? Existen 538 votos divididos entre los 50 estados y el Distrito de Columbia (que es donde se asientan los poderes, como para la República Mexicana lo es el Distrito Federal). Cada estado tiene un elector por cada uno de sus miembros en el Congreso: uno por cada legislador de la Cámara de Representantes (determinado por la población estatal) y uno por cada senador (cada estado tiene dos). Un candidato necesita la mitad más uno de los votos electorales, es decir 270 votos para llegar a la presidencia de los Estados Unidos.
Los electores emiten dos votos: uno para elegir Presidente y el otro para Vicepresidente. Estos sufragios son enviados al Congreso donde son certificados. Si dos candidatos presidenciales reciben la misma cantidad de votos electorales, la Cámara de Representantes decide quién se convierte en Presidente y el Senado hace lo propio con el Vicepresidente.
Una característica de la política estadounidense es que las empresas privadas participan en los procesos electorales mediante donaciones económicas. Estas donaciones sirven para ayudar a los candidatos que las empresas creen más favorables para sus negocios.
Existen dos partidos nacionales, los Demócratas y los Republicanos, el primero de ellos gobierna actualmente la Presidencia de los Estados Unidos representados por Barack Hussein Obama II, nacido en Honolulu, Hawái, Estados Unidos, el 4 de agosto de 1961, conocido como Barack Obama, quién es él 44 Presidente de los Estados Unidos. Fue Senador por el estado de Illinois desde el 3 de enero de 2005 hasta su renuncia el 16 de noviembre de 2008. Es el quinto legislador afroamericano en el Senado de los Estados Unidos. También fue el primer candidato afroamericano del Partido Demócrata y es el primero en ejercer el cargo Presidencial.
Como Senador promovió la legislación sobre el fraude electoral, el terrorismo nuclear y la atención del personal militar que regresa a Estados Unidos desde las misiones militares en Irak y Afganistán. El 9 de octubre de 2009 le fue concedido él Premio Nobel de la Paz por sus esfuerzos diplomáticos en pro del desarme nuclear, la consecución de un proceso de paz en Oriente Medio y fomento la lucha contra el cambio climático.
Por su parte los Republicano son representados en la carrera presidencial por Willard Mitt Romney (nacido el 12 de marzo de 1947 en Detroit, Míchigan), es empresario y político estadounidense. Fue gobernador del estado de Massachusetts desde 2003 hasta 2007.
Las encuestas en los Estados Unidos para elegir al Presidente de su país, son creíbles y definitorias, actualmente el Presidente demócrata lidera a su rival republicano por escasos cinco puntos porcentuales entre los posibles votantes.
Con la carrera a nivel nacional empatada o muy reñida en la mayoría de los sondeos, la presidencia se decidirá en un puñado de estados donde muchos consideran que es difícil anticipar quien ganará.
Una de las conclusiones que debemos sacar los mexicanos de estas elecciones, es que después de que es electo el Presidente, el candidato perdedor y sus seguidores se suman o por lo menos no critican y descalifican al Presidente electo. Los electores tienen la fuerza suficiente para decidir por su presidente, de otra manera, si existieran dudas, la Cámara de Representantes y de Senadores deciden buscando siempre favorecer a su país.
Otro tema muy importante, yo diría relevante, es que los recursos económicos empleados son aplicados por la iniciativa privada soportado en su legislación. Sin embargo, los recursos públicos se ejercen mayoritariamente para fortalecer condados y estados, en ese orden, dicho de otra manera, su pacto federal en la distribución del presupuesto primero se atiende a la población directa y después a la burocracia.
Otro de los temas prioritarios será la agenda bilateral que interesa sobremanera a los mexicanos con nuestros vecinos norteamericanos, como son la reforma migratoria, temas de economía para que los vecinos cumplan los acuerdos y tratados suscritos, finalmente para sentar las bases de una política que nos beneficie a ambos países.
Hay mucho que aprender en la forma de elegir y gobernar a los estadounidenses, no solo el tema es la migración ni el armamento o las drogas, también existen temas que debemos observar. México como país es grandioso y muy rico particularmente por su gente; sin embargo, nuestro sistema político no es el adecuado para estos nuevos tiempos, basta observar que están haciendo los diputados y senadores. ¿Usted qué Opina?