in

‘El tizne me desgració la vida’

Superiberia

Miguel Ángel c. Mauss

el buen tono

Atoyac.-  Los pulmones de María Teresa del Río se encuentran dañados tal cual fumador compulsivo, sin embargo, no fue el tabaco el causante de este mal, fue el tizne emanado por el ingenio Central El Potrero.

Ella vive en la colonia Sixto González, una de las más afectadas por la contaminación de la factoría; “ya tengo asma bronquial, alérgica a la contaminación y también Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC), mis pulmones están negros”.

Los médicos le han dicho que sus males se deben principalmente a la contaminación de El Potrero, y la situación se agrava más al recibir la mayor parte del humo y ceniza de las calderas, quienes habitan en los alrededores del ingenio.

“Cada zafra mis males se complican, tengo que estar cargando mis medicamentos porque sin ellos no sobrevivo, es triste porque en mi vida nunca fumé y ahora podría morir por daño en mis pulmones”, agregó.

Teresa del Río insiste en que no se debe cerrar el ingenio, pues es una fuente laboral importante para la región, sin embargo, sí exige su regulación para dejar de estar matando a los ciudadanos de la periferia.

“Los niños sufren de alergias y de los pulmones, no es posible ya tanta contaminación, además, nos hemos vuelto esclavos de la limpieza, porque no hay día en que no esté sucio”, señaló.

CANAL OFICIAL

Muere hombre electrocutado en El Pedregal

Niega inseguridad y culpa a hackeo