John Walker Lindh, el estadounidense que a comienzos de siglo copó las portadas de medio mundo tras ser capturado en Afganistán por formar parte de los talibanes, fue puesto este jueves en libertad tras pasar 17 años en prisión, una decisión que ha generado gran polémica, informaron medios locales.
Lindh, conocido como “el talibán estadounidense“, fue condenado en 2002 a veinte años de prisión tras declararse culpable de los cargos de prestar servicio al grupo insurgente y de manejo de explosivos.