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Internacional.- El Porsche 911 GT3 RS, la última joya de Stuttgart, es una máquina que desafía los límites de la ingeniería automotriz. Con un motor bóxer atmosférico de 4.0 litros y 525 caballos de fuerza, este deportivo está diseñado para los amantes de la velocidad pura y la adrenalina. Su aerodinámica avanzada y su chasis optimizado para pista lo convierten en un vehículo que se siente más en casa en un circuito que en las calles.
Acelerando de 0 a 100 km/h en solo 3.2 segundos, el GT3 RS no solo es rápido, sino también ferozmente eficiente. Cuenta con un sistema de suspensión activa que ajusta automáticamente la altura del chasis en función de la velocidad y las condiciones de la pista, ofreciendo un manejo incomparable. Además, su alerón trasero ajustable y frenos de cerámica mejoran el rendimiento en cada curva.
Este modelo, que rinde homenaje a la herencia de Porsche en las carreras, incluye detalles como el volante de Alcántara y asientos de competición, subrayando su enfoque en el rendimiento. Sin duda, el GT3 RS es un símbolo de la ingeniería alemana llevada al extremo, redefiniendo lo que un auto deportivo puede ser.
