Este lunes, el peso mexicano registró una caída del 1.25%, cerrando en 20.34 pesos por dólar, una depreciación que ha generado preocupación entre los analistas económicos. La principal causa de esta tendencia, según los expertos, es el fortalecimiento del dólar estadounidense, impulsado por la incertidumbre derivada de las recientes políticas económicas anunciadas por el Gabinete del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.
El dólar cerró en 20.41 pesos, un incremento del 1.18% respecto al día anterior, lo que refleja el nerviosismo de los inversionistas frente a las decisiones que podrían marcar la dirección de la economía global. Este fortalecimiento del dólar se ha visto acentuado por la especulación sobre las futuras medidas económicas de Trump, quien desde su victoria electoral ha generado un panorama incierto para los mercados.
Los analistas prevén que la debilidad del peso podría persistir en las próximas semanas, a medida que los mercados internacionales sigan evaluando las implicaciones de las políticas fiscales y comerciales que Trump implementará al asumir la presidencia de Estados Unidos. Las posibles medidas proteccionistas y su enfoque en la renegociación de tratados comerciales, como el TLCAN, continúan siendo temas que generan volatilidad en los mercados financieros.
Ante esta situación, el Banco de México (Banxico) está observando de cerca estos movimientos. Se espera que la institución tome decisiones en los próximos días para mitigar el impacto de la depreciación del peso y buscar estabilizar la moneda nacional en medio de la incertidumbre económica global. Los analistas anticipan que Banxico podría ajustar las tasas de interés o implementar otras medidas para frenar la caída del peso y contener posibles efectos negativos en la economía mexicana.
Mientras tanto, los mercados seguirán atentos a los desarrollos en la economía estadounidense y la implementación de las políticas de Trump, que podrían continuar influenciando la paridad del peso frente al dólar en los próximos meses.