IMPUDICIA
Nunca se fue y ahora se apersonó en el escenario para reclamar su tajada del botín. Es la deducción obligada sobre la reaparición del ex gobernante estatal, aquel que no debe ser nombrado, en una comilona con diputados priistas y su sucesor en la llamada Casa Veracruz. Vaya impudicia. Después de dejar al estado en situación de quiebra, arrodillado ante la criminalidad y a todos los veracruzanos endeudados hasta la tercera generación, ahora este personaje se presenta en público para retomar la conducción electoral del tricolor -y también del Gobierno estatal, según los analistas más agudos-.
Acorralado por el peñanietismo, el innombrable se mantuvo agazapado, intrigando y suplicando a través de personeros. Al parecer se le permitió retornar pero a la aldea, donde está su coto de poder, no a la tabla de ajedrez nacional. Viene, según cuentan, a hacerle frente a su alter ego, el panista Miguel Ángel Yunes Linares que será el encargado de la estrategia electoral de la alianza formada por los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD). Es más, lo mencionan como candidato a una curul por la vía plurinominal para enfrentarlo en un “tête à tête”, – o sea, mano a mano-, ya que a Yunes Linares también lo ubican en primer lugar de la lista plurinominal de la mencionada coalición opositora.
Alguien pudiera alegar que le darán el beneficio del fuero constitucional pero no lo necesita porque ninguno de los que dejó encargado del changarro procederá legalmente en su contra. Es más, los llamados “niños de la fidelidad” -y otros adultos mayores del mismo fidelato- lo recibieron como si fuera su mesías. Todo un espectáculo sobre la descompostura y el impudor. Sin embargo, aunque el innombrable es un excelente mapache electoral, su mala fama es la mejor aliada de la oposición pues la misma enlodará a todos los candidatos priistas para la elección que se avecina.
¿Qué veracruzano en su sano juicio votará por un priista que representa al innombrable, responsable de lo que hoy padecen? También habrá que ver si se cumple la iniciativa de algunos ciudadanos, incluidos priistas, que ya se organizan para aplicarle la misma medida que al panista Felipe Calderón tras la invitación a dar clases en la universidad estadunidense de Harvard. En la aldea no faltará hay el proyecto para reunir miles de firmas que se anexarán a un escrito dirigido al dirigente nacional del PRI, César Camacho y al copetón Enrique Peña Nieto para reclamarles que hayan sacado del cesto a tan aciago personaje y le hayan permitido regresar a Veracruz para hacer de las suyas. Mientras eso sucede, lo más recomendable es que ¡¡ todos se cuiden la cartera!!
Pero las calamidades no vienen solas. Ayer en Jalapa también reapareció su ex secretario de Gobierno y ex procurador de Justicia en los primeros meses de este sexenio, Reynaldo Escobar Pérez. Acudió a una conocida cafetería para que los reporteros lo entrevistaran, lo que confirmó que ni está fuera del país ni amparado, ni huyendo por temor a ser presentado ante un Ministerio Público. Al contrario, está de regreso en el escenario político. Es más, habló de los comicios venideros y dejó abierta la posibilidad sumarse al tinglado electoral. Por ello, las especulaciones se desataron y se habla que, al igual que su expatrón, también será candidato a una diputación local por la vía plurinominal. ¡Alguien debería llamar a los caza-fantasmas o por lo menos a un exorcista!, pues la película se llama: El Regreso de los Muertos Vivientes.
PRE-MIADOS
Renunciado el 23 de marzo del 2012 de la Subsecretaría de Ingresos del estado luego de un escándalo de corrupción, el cordobés José Antonio Mansur Beltrán fue nombrado el pasado miércoles como nuevo delegado de la Secretaría de Economía. Es decir, regresó a la nómina pública aún con el estigma de exprimir el presupuesto para beneficio personal, como se comprobó en las llamadas telefónicas que intercambió con Juan Alberto Armendáriz, quien fue subsecretario de Ingresos de Mario Marín, el “Gober Precioso”, de Puebla.
Según el audio difundido por el diario Síntesis, editado en la capital poblana, ambos personajes se ponían de acuerdo para “bajar dinero” en proyectos y “levantar un chorro de lana..cabrón” –palabras textuales- refiriéndose a partidas que la Federación enviaba a Veracruz. “Esa lana se queda en una cuenta oscura que detectamos y hay mucha lana”, le dijo Armendáriz al cordobés y éste se comprometió a hablar con el gobernante veracruzano pero fuera de su oficina -en Palacio de Gobierno- pues ahí “siempre hay mucha gente y hay orejas”, le espetó. El finísimo y honesto Mansur sólo estuvo 11 meses en la banca y ahora también está de vuelta, tal vez para concretar esos negocios que quedaron pendientes desde el 2012.
Por cierto, otros que estarían por tomar posesión como delegados del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en las zonas Norte y Sur de Veracruz, respectivamente, son otros fidelistas del mismo pelo: el sureño Antonio Benítez Lucho que iría a la Delegación Norte con sede en Jalapa y el ex alcalde de Veracruz, Jon Rementería Sempé que sería ubicado en la Delegación Sur con oficinas en Orizaba. Benítez Lucho se desempeñó hace tiempo como secretario particular del innombrable y en 1999 se desempeñó como delegado estatal del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
En tanto, Rementería Sempé es un médico gastroenterólogo que se convirtió en secretario de Salud durante el primer tramo del sexenio anterior porque le curó una úlcera al innombrable y fue apuntalado por el empresario gasolinero -y supuesto prestanombres de mismo innombrable- Gilberto Bravo Torra. Después fue alcalde de Veracruz, alcaldía que alcanzó luego de que su primo, el panista Julen Rementería, trabajó en contra de su partido en las elecciones del 2007 y a favor del tricolor.
Rementería está considerado como uno de los ediles más pillos en la historia del puerto, y se menciona que su nombramiento como delegado del IMSS tuvo como moneda de cambio a su guapa hija, Ainara Rementería, diputada local por el distrito de Veracruz y suplente del senador José Yunes Zorrilla. Dado tal antecedente de Rementería Sempé, nada bueno se augura para el IMSS en la zona sur. Es más, muchos apuestan a que este señor terminará robándose hasta los cómodos de los enfermos y las “curitas” para vendar heridas en las clínicas. Recuerden que “gallina que come huevo, aunque le quemen el pico”.
LENGUAS DE TRAPO
En temas nacionales, pareciera que la moda que impuso el guanajuatense-analfabeta Vicente Fox retornó en la clase política pues hay una horda de desbocados e insensibles personajes que despachan en oficinas públicas cuyas pifias no cesan. Por ejemplo, el copetón Enrique Peña Nieto se fue a vacacionar con su familia a las playas de Punta Mita en Nayarit, horas después de haber declarado “luto nacional” por la explosión ocurrida en la Torre de Pemex. La ola de protestas en las redes sociales, que llegaron a las planas de los periódicos -pues las radiodifusoras y televisoras se quedaron calladas, como siempre- obligó al copetón a regresar a la capital del país.
¿Y qué hizo?, sólo se dedicó a informar en su cuenta de Twitter sobre cada cadáver a la vista, para dar la apariencia de estar al tanto del asunto. Otra cosa foxiana es la explicación oficial sobre el origen de la explosión, la cual no convence a nadie, más aún cuando hay la especulación de un atentado. Para acabar de arruinar el asunto, el procurador de Justicia, Jesús Murillo Karam se avienta un chiste misógino diciendo, en referencia a una maleta sospechosa que fue sacada del lugar por elementos de la policía capitalina, que en el interior solo se encontró cosméticos “lo más peligroso para un hombre”.
El chascarrillo desafortunado en medio de la tragedia. Murillo podría haber agregado que los cosméticos eran para que lo usaran las “lavadoras de dos patas”, como llamaba Fox a las mujeres, y no para hacer explotar la torre de Pemex. Parece que esto de las lenguas de trapo es una epidemia pues Luis Walton, alcalde de Acapulco y amigo de Dante Delgado Rannauro, se aventó otra reflexión sesuda: que la violación de seis turistas españolas en ese puerto es un hecho que sucede en todo el mundo y todo el tiempo, minimizando la tragedia para las víctimas. Al día siguiente, Walton salió llorando ante la prensa a disculparse y a pedir auxilio de la Federación para corregir sus pifias en materia de seguridad.
Sin duda el ejercicio de la política pública se desgastó en los últimos años y aunque se podría decir que perdió “seriedad” -pese a que en México los políticos nunca han sido serios en los últimos 80 años- más bien llegó a lo burdo, a lo tosco y lo corriente. Recurrir a los chistes o comentarios fuera de lugar pretenden llenar espacios donde se necesita la probidad, la experiencia, el conocimiento de causa -o por lo menos el conocimiento de las leyes- y en su caso hasta el consuelo y la solidaridad es muestra de que la conducción del país está en manos de analfabetas funcionales, tan llenos de impericia, indolencia e irresponsabilidad.
De ahí que es certero el pronóstico de que a México le esperan tiempos muy difíciles pues la autoridad se desdibuja en estos payasos. Es muy grave también que el resto de funcionarios públicos de todos los niveles toman las pifias del Presidente de la República y sus colaboradores cercanos como una regla de oro que deben imitar a pie juntillas. Ahora todos parecen alegar que si el presidente lo hace, ¿yo por qué no? Ahora si se puede afirmar que, al parecer, en México se agotaron los hombres de Estado y llegaron los payasos con lenguas de trapo.
