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El minutero

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FUEGO POST-ELECTORAL

 La realidad desmintió a los que presumieron comicios limpios, civilidad política y vocación democrática en Veracruz. A menos de una semana del 7 de julio, la entidad sigue ardiendo por los conflictos post-electorales: hay cuatro municipios – Chumatlán, Ixhuatlán del Café, Coscomatepec y Tlacojalpan- donde podrían anularse las votaciones porque quemaron urnas y hasta las sedes locales del Instituto Electoral Veracruzano (IEV), y en otra decena hay protestas frente a las comisiones municipales, bloqueo de carreteras y hasta amagos de linchamiento de los supuestos ganadores. 

También ayer tuvieron que resguardar con policías la sede estatal del IEV en Xalapa ante la llegada de un contingente de perredistas procedente de Las Choapas y que acusa al árbitro de avalar un fraude para imponer al priista Miguel Ángel Tronco, hermano del diputado electo por el distrito de Coatzacoalcos Rural, y también ex munícipe Renato Tronco Gómez, cacique de horca y cuchillo.  Por si eso no fuera suficiente ya hay un escándalo nacional por la desaparición de 92 de 128 ciudadanos originarios del estado de Morelos que fueron traídos por el Revolucionario Institucional a la zona norte del estado para votar a favor de candidatos del tricolor, servir como grupos de choque contra la oposición, saquear las sedes de partidos y casas de campaña y provocar violencia el pasado 7 de julio. 

La Comisión de Derechos Humanos de aquella entidad confirmó haber recibido la petición de los familiares para buscar a los morelenses desaparecidos. Es un caso delicado pues hay quienes presumen que estas personas pudieron ser víctimas de la delincuencia organizada, la que también ingirió en los comicios locales y aunque la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) a cargo del siempre ineficiente Amadeo Flores Espinosa ha negado conocer del asunto.

La movilización de “turistas electorales” de otros estados hacia Veracruz no es cosa nueva hay que recordar que en el 2011 prosperaron denuncias contra ciudadanos, también de Morelos, que vinieron a Boca del Río a votar por el entonces candidato priista a la alcaldía Salvador Manzur, hoy alcalde con licencia y fugaz secretario de Finanzas, y el tema fue exhibido por las principales televisoras a nivel nacional. Así como se movilizaron personas de Morelos también hubo contingentes de Oaxaca, Tabasco, Puebla e Hidalgo que hicieron lo mismo en otras zonas veracruzanas.

 

DESTINO KÁRMICO

 

Todo parece apuntar a que el panista Francisco Vega de la Madrid será el próximo gobernador de Baja California pues ya el tricolor retiró su petición de hacer el recuento total de los sufragios -el llamado “voto por voto”-, lo que confirma que los comicios de esa entidad fueron la moneda de cambio para conservar el Pacto por México del copetón Enrique Peña Nieto. Se sacrificará al priista Fernando Castro Trenti, cercano al poderoso coordinador parlamentario en la Cámara de Diputados y ex gobernador de Sonora, Manlio Fabio Beltrones para evitar que el PAN y PRD se retiren del acuerdo.  Y como ya se ha citado, lo sucedido en Baja California tiene implicaciones en Veracruz pues el delegado priista en esas tierras es el senador Héctor Yunes Landa.

 Del triunfo de su partido dependía buena parte de su capital político a futuro, es decir, con miras a las elecciones del 2016 para renovar la gubernatura veracruzana. Ahora se regresará a la entidad donde ya lo esperan acusaciones de operar en contra de los candidatos del tricolor en el distrito de La Antigua, donde fue legislador local, y una de sus principales detractoras que ha pagado inserciones en los medios impresos para acusarlo es la candidata perdedora  a la alcaldía, Karime Aguilera, ex directora de Espacios Educativos en el sexenio pasado, o sea, una fidelista de cepa. Las aspiraciones de Yunes Landa caminan hacia el cesto de la basura. El karma es poderoso, pues.

 El destino también alcanzó al terrablanquense Francisco Portilla Bonilla, al que por fin los cordobeses le pusieron un alto a su carrera chapulinesca que en los últimos diez años lo había mantenido enchufado al presupuesto público. Claro, hablando de los cargos de elección popular -dos veces presidente municipal y una vez diputado local- pues el señor ha pasado toda su vida como burócrata, viviendo del dinero del pueblo. Por esa costumbre, muchos dudan que Portilla se resigne a regresar a la notaría pública que posee y no es de extrañar que ya esté suplicando porque sea contratado en el gobierno estatal pues es sabido que  practica esa filosofía de que “vivir fuera del presupuesto, es vivir en el error”. Por lo pronto, al Rey de los Chapulines le cortaron las alas. Otra muestra de que el destino kármico existe.

 También en el tema de los comicios en Baja California está en tela de juicio la empresa Profesionales en Ingeniería y Sistemas (Proisi) que recibió un contrato millonario por realizar el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), mismo que tuvo errores garrafales y hasta el PRI lo cuestionó. El grupo Proisi es el mismo que el domingo pasado realizó en Veracruz el PREP mismo que se “cayó” y estuvo paralizado varias horas, provocando confusión, incertidumbre, sospecha de fraude y hasta la furia de los candidatos. Proisi ha recibido contratos, millonarios también, durante los ocho años que Carolina Viveros García, ha estado al frente del IEV, esos convenios sospechosamente se  han renovado cada elección pese al mal servicio de la empresa. Otra raya más a la tigresa Carolina, la cual a como va terminará siendo pantera negra.

 

SIN MUCHA TELA

 

Para la próxima Legislatura estatal no habrá mucha tela de dónde cortar en eso de la experiencia legislativa, el debate, la oratoria y el cabildeo ya que de los 50 diputados que llegarán solamente una decena tienen experiencia en esos menesteres y en la mayoría de ellos ha sido mediocre. Los que ya han sido diputados federales son el priísta Ricardo Ahued del distrito Xalapa Urbano y el plurinominal Juan Nicolás Callejas Arroyo, de quien se espera sea el coordinador de la bancada priista y tal vez ocupe la presidencia de la Mesa Directiva o de la Junta de Coordinación Política. Callejas Arroyo, ex dirigente de la Sección 32 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Eduación (SNTE) también ha ocupado curules a nivel local en varias ocasiones, la última en la 60 Legislatura (2004-2007) en la que ocupó la presidencia. 

El señor no se distingue por su oratoria sino por su habilidad para transar y pactar, y aún así, será el más “experimentado” en la legislatura venidera –así de amolado estará el resto, pues-. Del tricolor también arribará Raúl Zarrabal por Boca del Río, quien ya fue diputado local en la 61 Legislatura (2007-2010) y formó parte del grupo denominado “Los NiNis” pues ni legislaban ni asistían a las sesiones y ni subían a la tribuna, las veces que acudían al recinto se la pasaban chateando en sus teléfonos celulares. Los otros dos miembros de ese clan fueron el cordobés Martín Becerra, suplente del cordobés Francisco Portilla y José Ruiz Carmona.  De esa Legislatura también formó parte el ahora diputado electo por el distrito de Coatzacoalcos II,  Renato Tronco Gómez, finísima persona que sólo una vez subió a tribuna para provocar la risa de todos. 

En aquella Legislatura llegó abanderado por el PAN y luego se declaró “independiente” -que en cristiano significa priista disfrazado- pues negoció que no lo encarcelaran por el crimen de un regidor cuando era alcalde de Las Choapas. Tronco Gómez regresa a la curul, ahora con el cabello suelto pero sin quitarse el sombrero, y bien podría formar el llamado Bronx o Rangers legislativo con otros de su mismo pelo como el porteño Antonio Baxzin, líder de los trabajadores municipales de Limpia Pública, Minerva Saucedo, esposa del líder estatal de Antorcha Campesina y el cuequeño Juan René Chiunti.

 Baxzin Mata y Saucedo arribarán por la vía plurinominal mientras que Chiunti ganó el distrito de Cosamaloapan. Los tres son dinamita pura, capaces de escupir o agarrar a golpes en público a cualquiera que tenga la osadía de cuestionar al tricolor.

Los otros priistas que tiene experiencia legislativa son el expanista Rafael García Bringas que ya fue diputado federal por Coatzacoalcos -¿alguien se acuerda de alguna intervención en tribuna o iniciativa que haya hecho?, al igual que Jesús Vázquez González, ganador de Acayucan,  sobrino del desaparecido Cacique del Sur, Cirilo Vázquez Lagunes.

 En el PAN andan peor porque destacan Joaquín Guzmán Avilés, quien ya ha sido diputado local y bien podría arreglárselas sólo para formar su propio Bronx azul, Julen Rementería del Puerto que también ya fue diputado local en la 58 legislatura y cuyo recuerdo más sobresaliente es sacar una enorme cuchara en una sesión para protestar por la distribución del presupuesto en el gobierno de Miguel Alemán Velasco. Para variar, la idea de exhibir la “cucharota” se la robó a su compañero Sergio Vaca. A la bancada panista se sumará la también ex diputada local María del Carmen Pontón Villa que siempre ha lucido de un gris esplendoroso.

 Los otros 40 diputados son prácticamente novatos en cuestiones parlamentarias. De los pocos que podrían destacar -haciendo pronósticos aventurados- en el debate legislativo son el xalapeño Ahued,  el perredista Daniel Nava Trujillo que llegará por la vía plurinominal y Cuauhtémoc Pola Estrada, del Movimiento Ciudadano, también plurinominal, aunque falta ver el desempeño de los que llegan sin haber tenido cargos legislativos o edilicios en los que hayan brillado por ideas o declaraciones. Ante tal panorama la coincidencia es abrumadora: la próxima legislatura no debe generar muchas expectativas ni siquiera en la retórica.

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