Washington.- Momento interesante en la elección estadounidense. Gonzalo Curiel, Doctor en Leyes por la Universidad de Indiana fue nombrado Juez de la corte superior en San Diego por el gobernador republicano Schwarzenegger y más tarde Juez Federal por el presidente Obama. Curiel, nacido en Indiana de padres mexicanos tuvo que vivir en la clandestinidad bajo protección de alguaciles federales después de que un asesino del cártel de los Arellano Félix fue grabado diciendo que tenía orden de asesinarlo.
Trump dice en un discurso que Curiel no puede ser imparcial en un juicio contra la “Universidad Trump” por su origen Mexicano. En dos entrevistas redobla sus argumentos diciendo “no puede ser imparcial, estoy construyendo un muro, estoy construyendo un muro”.
Paul Ryan, líder de la mayoría republicana en el congreso llama al comentario de Trump “Definición de libro de texto de comentario racista”.
Lindsey Graham, senador republicano de Carolina del Sur le retira su apoyo a Trump diciendo que le gustaría apoyar al candidato republicano pero que no puede.
Varios miembros del establecimiento republicano exigen a Trump cambiar su retórica.
Trump dice que su comentario fue “malinterpretado”. El problema no es “la retórica” de Trump. El problema es Trump. Podrán fabricarle discursos y enseñarle a leer del apuntador, pero “aunque la mona se vista de seda…”
La campaña de Hillary puede utilizar el momento y llevar una nueva luz a las propuestas del magnate. Tanto la deportación de 12 millones de mexicanos como la construcción del muro pueden ser vistos no como soluciones a problemas Estadounidenses sino como delirios absurdos de un racista sin escrúpulos.
California tiene una ley especial para elegir Senadores. Los dos candidatos con más votos van a la elección general. Normalmente es uno de cada partido. Pero, por primera vez en la historia, los dos primeros lugares fueron ocupados por dos candidatas demócratas: Kamala Harris y Loretta Sánchez.
Esta es la herencia del discurso anti-mexicano del gobernador republicano Pete Wilson. ¿Se acuerdan de la proposición 187? Habría que desear que el discurso de Trump tenga el mismo efecto que el de Wilson, esta vez a nivel federal.