Orizaba.- Los fumadores pasivos tienen una probabilidad del 30 por ciento de padecer cáncer pulmonar y un 25 por ciento de desarrollar enfermedades cardiovasculares e infartos, por los efectos nocivos de inhalar las sustancias tóxicas del humo del cigarro, que emanan de los fumadores activos.
Lo anterior, de acuerdo con información preventiva que emitió el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en la Delegación Veracruz Sur, en la que se recomienda a la población no convivir en exceso con fumadores, sobre todo en lugares que se encuentren cerrados.
Además de que las mujeres embarazadas deben evitar exponerse largos períodos al humo del tabaco, porque ponen en riesgo la vida de sus bebés, ya que al inhalar el humo del cigarro atraen complicaciones, es decir, nacimientos prematuros por desprendimiento de placenta y bajo peso del niño al nacer.
Según el área de Prevenimss, la bronquitis, enfisema pulmonar, obstrucción crónica pulmonar y el asma, son las principales enfermedades que contrae un fumador pasivo, pero lo más grave es que los síntomas se comienzan a hacer presentes en el cuerpo pasados ocho o 10 años.
Finalmente, cabe mencionar que la sintomatología de quienes constantemente se exponen al humo del tabaco, empieza con problemas respiratorios de forma periódica, como tos, dolor de garganta, proliferación de flemas y disnea, que es la falta de aire al caminar cortas distancias.