En un vibrante enfrentamiento en el Estadio Azteca, los Diablos Rojos de México se impusieron 4-3 a los Yankees de Nueva York en el primero de dos juegos de exhibición, en lo que fue un emocionante regreso del béisbol de Grandes Ligas a tierras mexicanas.
La estrella dominicana Robinson Canó, en su primera temporada con los Diablos Rojos, demostró su valía al conectar un jonrón crucial y contribuir con dos carreras impulsadas para sellar la victoria de su equipo. Canó, de 41 años, quien ha dejado una marca imborrable en las Grandes Ligas con nueve temporadas junto a los Yankees, ahora brilla en México, mostrando su talento y experiencia en cada jugada.
El mexicano Japhet Amador y el dominicano Arístides Aquino también destacaron al empujar carreras que resultaron clave para el triunfo de los Diablos Rojos. Por su parte, el venezolano Carlos Narváez y Cole Gabrielson mantuvieron vivas las esperanzas de los Yankees con sus batazos oportunos, aunque no fueron suficientes para revertir el marcador.
El enfrentamiento no solo fue un espectáculo deportivo, sino también un momento histórico, ya que marcó el retorno de los Yankees a México después de más de medio siglo, desde aquellos juegos de exhibición en 1968. Además, fue la primera apertura de Trevor Bauer con los Diablos Rojos, un paso importante en su camino de regreso a las Grandes Ligas tras cumplir una suspensión.
El Estadio Azteca vibró con la emoción del béisbol de alto nivel y la pasión de los aficionados, quienes disfrutaron de cada lanzamiento, cada batazo y cada jugada memorable. Con este triunfo, los Diablos Rojos de México consolidan su posición como un equipo a tener en cuenta, mientras que los Yankees de Nueva York dejan una impresión duradera en su regreso a este emocionante escenario.