New York.- Tras ser extraditado de México, Joaquín Guzmán Loera El Chapo, arribó ayer a un juzgado de Nueva York, en donde se declaró no culpable de los cargos que le expusieron y quedó preso sin derecho a fianza.
Fiscales estadounidenses no estaban enterados de que México extraditaría el pasado jueves al narcotraficante, a quien buscan decomisarle 14 mil millones de dólares obtenidos de traficar al menos 200 toneladas de cocaína de 1989 al 2014.
Guzmán fue asistido por un intérprete. Consultado por el Juez si tenía claras las acusaciones, el capo respondió: “Sí señor”.
A Guzmán Loera se le imputan 17 cargos, entre ellos dirigir una empresa criminal, tráfico de armas y lavado de dinero.
El líder del Cártel de Sinaloa será procesado en una Corte en Brooklyn, su abogado dijo que la extradición tiene motivos políticos, “se ve claramente un contubernio entre el Gobierno federal con el Poder Judicial Federal”.
