Ciudad Mendoza.- El factor económico es la causa de que sólo el 50 por ciento de los jóvenes que egresan de la Escuela de Bachilleres América (EBA), intenten inscribirse en una universidad pública, y con menos expectativas en una escuela particular.
En el ciclo escolar próximo a culminar, de 152 egresados del sexto semestre, sólo 78 buscaron ingresar a la Universidad Veracruzana (UV), al Instituto Tecnológico de Orizaba (ITO), a la Universidad Pedagógica Veracruzana, a la Universidad Popular Autónoma de Veracruz (UPAV), y hasta escuelas de Puebla y la UNAM, en la Ciudad de México, mientras que los otros 74 esperarán un año, en tanto, buscarán un empleo.
La estadística del Inegi indica que en México sólo uno de cuatro jóvenes entre 19 y 23 años, tiene acceso a alguna universidad, no está en desapego de lo que sucede en el municipio con los jóvenes que culminan la preparatoria en la única escuela pública que hay de este nivel.
Al respecto, el director de la EBA, Luis Arturo Santiago Martínez, señaló que la crisis económica de las familias que orilla a los jóvenes a buscar trabajo con su certificado de bachillerato, se conjuga con los pocos espacios que hay en las universidades públicas de la región, para frenar que los egresados de la preparatoria logren cursar una carrera universitaria y ejercer en el ambiente profesional.
Indicó que en la región las únicas oportunidades de desarrollo de los egresados del bachillerato no sólo de la EBA, sino del Cobaev y los Cetis, son las universidades públicas, pero que el limitante es la falta de espacios. Pensar en escuelas privadas, dijo que es algo complicado por sus costos elevados en las mensualidades, que superan los 2 mil pesos.
“Las condiciones sociales y sobre todo económicas de los jóvenes hacen que elijan las universidades públicas porque para la mayoría son su única opción de desarrollo, la educación privada a la mayor parte de los egresados les está negada por sus situaciones familiares. Aunque no descartamos que haya otros factores, como la apatía para que los chicos continúen sus estudios”, expresó.
Finalmente, el directivo escolar destacó que lo lamentable del problema es que hay jóvenes que ante la falta de oportunidades para seguir estudiando, se refugian en el ocio o en otras actividades nada provechosas y sí muy perjudiciales.