Agencias
Washington D.C. – Estados Unidos ha destinado más de 176 millones de dólares a las administraciones de Enrique Peña Nieto y Andrés Manuel López Obrador para implementar medidas de control migratorio en México, según un reciente informe del Congreso estadounidense. Estos fondos han sido utilizados para la instalación de equipos biométricos en 52 estaciones migratorias, con acceso para agencias estadounidenses, y para capacitar a más de mil funcionarios mexicanos en el manejo de la migración irregular.
El financiamiento otorgado por las administraciones de Barack Obama, Donald Trump y Joe Biden también ha permitido la construcción de bases navales en ríos, el establecimiento de cordones de seguridad en las fronteras con Guatemala y Belice, y el uso de drones para la vigilancia fronteriza. Además, se adquirieron equipos de inspección no intrusiva. El informe destaca que desde 2019, México ha adoptado una postura más estricta hacia la migración, impulsada por las presiones de los gobiernos de Trump y Biden. La actual presidenta Claudia Sheinbaum continúa con las políticas migratorias de su antecesor, López Obrador, incluyendo el despliegue de más de 25,000 efectivos de la Guardia Nacional en apoyo al Instituto Nacional de Migración (INM).
El reporte también revela que entre 2017 y 2023, Estados Unidos ha destinado más de 163 millones de dólares a la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (COMAR) para atender las crecientes solicitudes de asilo en México, que aumentaron de 40,000 en 2020 a más de 140,000 en 2023. El financiamiento también ha sido canalizado a organizaciones de la sociedad civil que brindan asistencia humanitaria a los migrantes, como albergues, ayuda legal, transporte y atención médica.
