AGENCIA
Quito.- El ejército de Ecuador anunció hoy la detención de 329 presuntos criminales y la muerte de otros cinco, como parte de una operación intensiva desencadenada por la jornada de violencia que sacudió al país el martes, dejando un saldo de 14 personas fallecidas. Entre las víctimas mortales, se encuentran dos policías, mientras que otro agente se debate entre la vida y la muerte, según informaron las fuerzas armadas.
Las operaciones militares también lograron la liberación de cuatro policías secuestrados, aunque aún se mantienen retenidos 125 guardias penitenciarios. Los detenidos, vinculados a tres grupos delictivos identificados como “Tiguerones”, “Lobos” y “Choneros”, fueron capturados en una serie de redadas. Además, una guarida criminal fue consumida por el fuego como parte de la respuesta del ejército a la escalada de violencia.
El almirante Jaime Vela, jefe del comando conjunto de las Fuerzas Armadas del Ecuador, anunció en una conferencia de prensa que agentes de la fuerza terrestre ya están desplegados en todo el país para mantener la seguridad y combatir a los grupos delictivos. Este despliegue responde a los violentos acontecimientos del martes pasado, cuando bandas criminales tomaron un canal de televisión y llevaron a cabo varios atentados, marcando una de las peores ofensivas de la delincuencia en el país sudamericano.
Estos incidentes fueron la respuesta a un toque de queda decretado por el gobierno, que tuvo como antecedente la fuga del traficante conocido como Fito. El presidente Daniel Noboa declaró que el país se encuentra en “estado de guerra” después de tres días de violencia ligada al narcotráfico y se comprometió a enfrentar a más de 20 mil miembros de organizaciones que calificó como “terroristas”.
Bajo esta declaración, el mandatario ordenó a los militares “neutralizar” a las bandas vinculadas a cárteles de México y Colombia. El presidente expresó su determinación de no ceder ante los grupos delictivos y anunció medidas para deportar a presos extranjeros, especialmente colombianos, con el objetivo de reducir la población carcelaria y los costos asociados.
Legisladores expresaron su respaldo a las fuerzas armadas, aunque Noboa aclaró que no necesita la aprobación de ellos para sus acciones, pero sí ha solicitado su apoyo. En tanto, Estados Unidos prometió ayuda, incluyendo una cooperación de 200 millones de dólares como parte de un plan de seguridad de 800 millones de dólares.
En medio de la ofensiva contra el narcotráfico, el presidente Noboa anunció que jueces y fiscales que ayuden a los líderes de grupos terroristas serán considerados parte de la red de terrorismo. La crisis se desató tras la fuga de Adolfo Macías, alias Fito, jefe de la principal organización criminal del país conocida como “Los Choneros”.
La situación sigue siendo tensa, y el gobierno ecuatoriano busca soluciones contundentes para restaurar la paz y enfrentar el crimen organizado que ha afectado profundamente al país en los últimos días.