CDMX.- La economía mexicana muestra señales de desaceleración que la llevarán a crecer este año por debajo de 2.0 por ciento registrado en 2018, pero sin un deterioro acelerado o riesgos de recesión, afirmaron economistas y financieros.
Coincidieron en que dicha desaceleración obedece al “frenón” económico que tradicionalmente se da cada inicio de Gobierno por la “curva de aprendizaje” que experimentan los nuevos funcionarios, así como el menor ritmo de crecimiento de la economía global.
A esto se suman factores coyunturales registrados en el inicio de año, como el desabasto de combustibles, los bloqueos a vías ferroviarias o los “paros” laborales en maquilas del Norte del País, que llevaron a que la economía mexicana presente un nulo crecimiento.
Para enfrentar este entorno adverso, los especialistas estimaron que las autoridades gubernamentales deben fortalecer el Estado de Derecho, así como mantener la estabilidad macroeconómica y la disciplina fiscal, condiciones necesarias para asegurar la inversión y reactivar la actividad económica.