AGENCIA
EEUU.- Donald Trump ha aceptado oficialmente la nominación del Partido Republicano para buscar la presidencia de Estados Unidos en las próximas elecciones. Durante la Convención Republicana, Trump tomó la palabra por primera vez desde el atentado que sufrió en Pensilvania, brindando su versión de los hechos.
El expresidente afirmó que estuvo a “un cuarto de pulgada” de recibir un balazo en la cabeza, señalando que un movimiento instintivo en el último instante le salvó la vida. “Si no hubiera movido la cabeza en el último instante, estaría muerto”, declaró Trump. Además, destacó que ninguna persona salió corriendo durante el incidente, lo cual, según él, evitó una posible estampida que pudo haber causado más víctimas.
Trump también mencionó un aprendizaje inesperado del ataque: “Las orejas son una de las partes que más sangran del cuerpo humano”. Durante el evento, rindió homenaje a Corey Comperatore, un bombero que murió baleado durante los hechos, besando su casco y pidiendo un minuto de silencio en su honor.
En su discurso, Trump reafirmó su compromiso de terminar el muro fronterizo que prometió durante su primera administración y anunció planes para llevar a cabo la “mayor deportación” de la que se tenga registro en la historia de Estados Unidos. “La plataforma republicana promete lanzar la mayor operación de deportación en la historia de nuestro país”, afirmó el candidato.
Trump también mostró una gráfica que estaba exponiendo durante el atentado, destacando que en su gobierno se registraron los índices de migración ilegal más bajos. Este enfoque en la seguridad fronteriza y la inmigración ilegal sigue siendo uno de los pilares de su campaña.
La aceptación de la nominación por parte de Trump y sus promesas de campaña han generado diversas reacciones entre los votantes y analistas políticos. Mientras algunos aplauden su enfoque firme en la seguridad y la inmigración, otros critican sus propuestas por considerarlas extremas y divisivas.