El senado brasileño condena a Dilma Rousseff por 61 votos a 20 a dejar desde hoy de forma definitiva la presidencia. Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), apartada provisionalmente del cargo desde mayo, tiene también un mes de plazo a partir de hoy para abandonar para siempre el Palacio de la Alvorada, su residencia oficial durante seis años, dos mandatos y medio. Brasil culmina así el cambio de Gobierno más traumático y esquizofrénico de las últimas décadas. La votación constituyó el último y esperado capítulo de un largo proceso deimpeachment que comenzó el 2 de diciembre y que ha mantenido al país en suspenso.